Adicción a pantallas en niños: ¿Cómo les afecta la tecnología?
Enlace copiadoLas pantallas nos rodean en nuestro día a día. Ya sea por trabajo, ocio o estudios, pasamos muchas horas al día delante de ordenadores, teléfonos, tablets y televisiones.Pero, mientras los adultos somos más conscientes de sus riesgos y ponemos generalmente límites, esto no ocurre con los más pequeños, en los que la adicción a pantallas en niños puede convertirse en un problema importante.
En los niños no se ha completado aún el desarrollo cerebral y la sustancia gris tiene una densidad más baja. Sigue leyendo 👇
Índice
¿Por qué los niños pueden ser más adictos a las pantallas?
Todo ello conlleva que sean más impulsivas y, por tanto, que controlen menos las adicciones. Incluso que tengan respuestas más agresivas.
Por ello, la dopamina, en concreto la sensación placentera que nos proporciona a todos ver, por ejemplo, un “like” en una red social, vídeos en un móvil o jugar a una consola es más complicada de controlar en los más pequeños y hace que la adicción de pantallas a niños un problema importante.
La dopamina juega un papel fundamental para tareas fundamentales para la supervivencia como comer o reproducirse, proporcionándonos una experiencia agradable que nos lleva a que la repitamos, pero en el caso de un uso abusivo de pantallas no tienen estas repercusiones.
Esta hormona nos empuja a coger constantemente el móvil o convierte a los niños adictos a Youtube, todo ello por la búsqueda de una recompensa cerebral. Incluso muchas aplicaciones están precisamente diseñadas para fomentar esta dependencia.
El resultado es una adicción con consecuencias muy peligrosas.
¿Qué trastornos puede provocar la adicción de pantallas a niños?
El exceso de pantallas en niños y niñas puede causar trastornos de diferente tipo, desde limitar las relaciones con otras personas de su edad o su entorno a problemas de sueño e incluso psicológicos. Te indicamos algunos de ellos:
- Trastornos del lenguaje, con graves problemas de comunicación y concentración. Cuando los niños están delante de una pantalla generan un efecto de detención del movimiento y desconexión con su alrededor.
- Problemas para conseguir un sueño suficiente y de calidad.
- Aislamiento.
- Baja tolerancia a la frustración en la vida real.
- En casos graves se altera la circulación de los fluidos, afectando al área de comunicación y creando problemas de conexiones cerebrales con síntomas que se aproximan al autismo o a trastornos bipolares.
1. Alteración de los patrones de sueño
De forma general, la exposición a pantallas puede provocar dificultad para conciliar el sueño. En este post te proporcionamos 11 trucos para dormir y conseguir un sueño de calidad.
Su iluminación blanca y brillante y destellos alteran la melatonina, una hormona fundamental para inducir la fase REM del sueño en la que se produce el descanso cerebral.
En el caso de los niños, este trastorno genera una mayor agresividad además de generar trastornos en el metabolismo de los niños y niñas que acaben en sobrepeso.
Por ello, se debe evitar toda exposición a pantallas durante al menos una hora antes de irse a dormir.
2. Fatiga ocular y riesgo de miopía
Otro de los problemas importantes de salud relacionado entre niños y pantallas es la fatiga ocular.
Esta se manifiesta cuando los ojos realizan un esfuerzo acomodativo excesivo con actividades que implican ver de cerca durante mucho tiempo.
Por ello, desde el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas (CNOO) señalan que un uso abusivo e incontrolado de pantallas aumenta notablemente el riesgo de sufrir miopía.
Para disminuirlo es importante que el tiempo que estén delante de una pantalla:
- Lo hagan en un entorno de iluminación adecuada, no en habitaciones o lugares a oscuras.
- Ajustar el brillo y contraste del dispositivo.
- Debe descansar al menos durante 20 segundos por cada 20 minutos de exposición.
- La pantalla de móviles y tablets debe estar a al menos 30 cm de distancia.
- Mantener una postura correcta, ubicando el dispositivo por debajo de la altura de los ojos.
¿Qué se puede hacer?
Aunque la adicción a pantallas en niños es cada día un problema mayor, precisamente, por afectar a una edad en la que aún no han finalizado su desarrollo cerebral, es más sencillo recuperar su capacidad mental. Para ello:
- No dejar ningún tipo de dispositivo con pantalla antes de los dos años.
- Se debe alejar a los niños de las pantallas, limitando sus horas de uso diariamente.
- Mantener sus habitaciones sin aparatos electrónicos de libre acceso para el niño.
- Se requiere un mayor esfuerzo por parte de los padres, abandonando soluciones fáciles como dejar el móvil o el ordenador para que se entretengan.
- Hay que ofrecer alternativas como otros juegos y aumentar las actividades con familia y amigos. Aquí os dejamos algunas actividades con niños para disfrutar en familia.
- Los adultos son un ejemplo para los niños, por lo que ellos también tienen que hacer un uso responsable de dispositivos electrónicos.
Contenido apropiado
Limitar el número de horas y ofrecer alternativas es fundamental, pero esto no quita que se impida por completo el uso de dispositivos con pantallas a los niños.
Por ello, es importante que el contenido que vean sea el apropiado, jugando los padres un papel indispensable para evitar la adicción a pantallas en niños. Para ello:
- Primar que el contenido sea didáctico y apropiado por su edad. Por ejemplo, para los niños adictos a Youtube es especialmente relevante usar siempre los filtros de edad, para que el contenido que vean sea el apropiado.
- Que un adulto no solo supervise, también acompañe y genere un vínculo con el más pequeño a través de actividades en común.
En definitiva, es importante un control de su uso, el desarrollo de otras actividades y, cuando los niños estén delante de las pantallas, que esta utilización sea responsable, tanto en su tiempo de uso y forma de hacerlo como en sus contenidos adecuados.
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