Dientes amarillos. Prevención, causas y tratamientos
No todo el mundo tiene un color blanco impoluto en su dentadura. La tonalidad puede variar en cada boca por causas naturales, pero, además, existen muchos factores externos que, poco a poco, pueden ir amarilleando nuestros dientes.
Tener los dientes amarillos es algo que afecta a un gran número de personas y, para muchos, va incluso más allá de una cuestión estética, pudiendo llegar a afectar a su estado emocional. Y, la mejor solución para evitarlo, es tomar medidas a tiempo.
¿Quieres saber cuáles son las principales causas que hacen que los dientes adquieran un tono amarillento y cómo poder prevenirlo? En AEGON Seguros nos preocupamos por ti, así que sigue leyendo y te explicamos qué es lo que debes hacer para mantener una sonrisa de película.
¿Por qué los dientes se ponen amarillos?
Como hemos dicho, son muchos los motivos por los que la tonalidad de nuestros dientes puede ir variando, adquiriendo, poco a poco, un color amarillento. De hecho, es algo bastante frecuente, y no es síntoma de un problema bucal grave. A continuación, te explicamos cuáles son los principales motivos:
Dientes amarillos por genética
La tonalidad natural de los dientes depende, única y exclusivamente, de cada persona en particular. Aunque, lógicamente, hay un condicionante genético que predetermina cuál va a ser la coloración que vamos a tener.
Uno de los factores más influyentes relacionados con la tonalidad dental es la relación que existe entre el color de la dentina y el grosor del esmalte, el cual, a su vez, depende del grado de mineralización que tenga sera mas grueso o fino, y con un color mas blanco o amarillento.
Además, también existen ciertas enfermedades congénitas que pueden provocar defectos en el esmalte, como podría ser la dentinogénesis o la amelogénisis imperfecta, y que llevan a tener dientes amarillos o incluso con tonalidades casi marrones.
Dientes amarillos por los hábitos alimenticios
Todo el mundo, en alguna ocasión, ha escuchado que existen ciertos alimentos, y bebidas, que facilitan que los dientes se vayan amarilleando, y sí, es cierto. Debido a su alta dosis de pigmentación, productos como frutas y verduras de colores intensos (remolacha, moras o arándanos) , alimentos ácidos (limón o tomate), café (por cromógenos)y té (por taninos), refrescos carbonatados (por desmineralizar el esmalte), vino (sobre todo el tinto, por los cromógenos y los taninos), pueden ir generando, poco a poco, manchas en los dientes que los vuelvan amarillos, al introducirse en los poros o hasta en los canalículos dentarios.
¿Quieres saber más? 👉 Entra en nuestro post y descubre los principales alimentos que dañan los dientes.
Dientes amarillos por la mala higiene bucodental
Todos los expertos dentales y autoridades en Salud bucodental como la OMS recuerdan, continuamente, que es fundamental llevar a cabo una estricta, periódica y buena higiene dental. Y no sólo para evitar tener problemas dolorosos y preocupantes, sino para prevenir que se vayan formando manchas o queden residuos de alimentos que acaben por desembocar en unos dientes amarillos.
Dientes amarillos por la medicación
Este factor es mucho más difícil de controlar, y es que la ingesta de según qué medicamentos puede llegar a repercutir en la coloración de nuestros dientes. Lógicamente, si el médico nos lo receta, es porque nuestra salud los necesita y, por tanto, debemos tomarlos.
Algunos tratamientos tienen como consecuencia el deterioro del esmalte. Entre ellos, destacan los antibióticos, como la tetraciclina o la doxiciclina, especialmente en etapas de desarrollo dentario.
El abuso de colutorios dentales a lo largo de la vida, o de pastas dentífricas con flúor, en menores de 6 años, también pueden ser causas de dientes amarillos.
Algunos quimioterápicos tienen la posibilidad de provocar un cambio en la tonalidad de las piezas.
Dientes amarillos por el paso de los años
El paso de los años y el avance de nuestra edad también influye en la coloración de nuestra dentadura. Al igual que el resto del cuerpo, se van deteriorando y, por lo tanto, es normal tener los dientes amarillos, o por lo menos, en una tonalidad menos claras que cuando somos jóvenes.
¿Cómo blanquear dientes amarillos?
La mejor prevención para evitar tener unos dientes amarillos es llevar a cabo una buena higiene dental y, además, excluir de nuestros hábitos cotidianos todos aquellos productos que puedan tener efectos negativos en nuestra dentadura.
Pero, es posible que ya sea tarde para evitarlo, así que ¿qué se puede hacer ahora? ¿cómo blanquear unos dientes amarillos?
Es muy importante tener cuidado con todo tipo de blanqueamiento casero, ya que puede resultar más perjudicial que beneficioso. Popularmente está extendida la creencia de que los cepillados con agua oxigenada, bicarbonato, limón o carbón son un milagro para blanquear los dientes amarillos en casa, pero en realidad, el uso de estos productos, además de resultar completamente ineficaces, son seriamente abrasivos para el esmalte dental. Así que, al utilizarlos, estamos fomentando más, si cabe, la decoloración de nuestros dientes.
Así mismo, todos aquellos tratamientos que se adquieren en farmacias y que se anuncian como remedios infalibles, por ejemplo, tienen un nulo efecto en el blanqueamiento de los dientes. Y es que son tan mínimas las concentraciones de sustancias blanqueadoras que tienen en su composición, que no pueden llevar a cabo ningún tipo de efecto favorable a largo plazo.
Por lo tanto, la mejor y única forma de conseguir un blanqueamiento dental eficaz, innocuo y duradero, es el que nos pueda proporcionar nuestro dentista. Acudiendo a su consulta, sabremos exactamente cuál es el tratamiento específico que necesitan nuestros dientes para eliminar la tonalidad amarillenta y, a la vez, estaremos previniendo cualquier enfermedad o dolencia bucal. Ellos son expertos en la materia, saben cómo cuidar y tratar nuestros dientes y, por ello, es la forma más recomendable de llevar a cabo cualquier acción en nuestra boca.
Los materiales que utilizan los especialistas están específicamente creados para un correcto tratamiento de nuestros dientes. No resultan abrasivos ni dañinos y, a la vez de estar consiguiendo el resultado de blanqueamiento deseado, conseguimos mantener toda la dentadura, al completo, en perfectas condiciones.
Conclusión
Tener una sonrisa bonita está al alcance cualquier persona. Como hemos dicho anteriormente, sólo es necesario acudir al dentista con regularidad y llevar a cabo unos hábitos e higiene saludable.
Contar con un buen seguro de salud dental, que además incluya una cobertura, te facilitará enormemente poder acudir a tus revisiones dentales y, además, no tendrás que desembolsar una elevada cantidad de dinero cada vez que vayas a la clínica.
¿Aún no tienes tu seguro dental? Ponte en contacto con nosotros y te informaremos y asesoraremos de todo lo que necesitas. En AEGON Seguros velamos por tu bienestar, así que no te lo pienses más y ¡apuesta por tu salud!
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