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¿Qué es la Hipercolesterolemia? Síntomas, tipos y tratamientos

Hipercolesterolemia

La hipercolesterolemia es una afección que tiene que ver con la dieta, pero que en otros casos es hereditaria. Esto, lo que se conoce como tener el colesterol alto, conlleva una serie de problemas de salud a los que hay que estar muy atentos, ya que pueden llegar a ser muy graves, provocando infartos y accidentes cerebrales.

Definición de hipercolesterolemia

Si hablamos de la hipercolesterolemia y de qué es, tenemos que decir que es la forma que emplean los médicos para referirse a los niveles de colesterol en sangre que exceden de lo normal, que son elevados.

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El colesterol es una grasa que tenemos en el cuerpo, no podemos vivir sin ella, pero si los niveles son muy altos se va acumulando en las paredes de las arterias. Poco a poco va formando placas que estrechan estas arterias y que incluso las endurecen.

Con el paso del tiempo, esa acumulación de grasa puede hacer que desarrollemos enfermedades cardiovasculares, de la clase de los ataques al corazón o los ictus.

Tipos de hipercolesterolemia

Aunque se habla de hipercolesterolemia de manera general, lo cierto es que hay varios tipos que hay que conocer con el fin de tratar mejor la enfermedad.

Hipercolesterolemia primaria

Es de origen genético y parece que es hereditaria. Dentro de esta encontramos la que se conoce como hipercolesterolemia familiar, que es la forma más común.

Los genes que regulan el colesterol de nuestro cuerpo mutan, de manera que no trabajan bien y esto hace que los niveles de esta grasa se disparen.

La hipercolesterolemia familiar heterocigota es la que más se padece. La persona que sufre la enfermedad hereda una copia de un gen mutado de sus padres, de forma que desde una edad temprana ya posee los niveles de LDL elevados.

En este caso, las personas que tienen esta clase de hipercolesterolemia llegan a desarrollar enfermedades de tipo cardiovascular de manera temprana, antes que el resto de la población.

También existe la hipercolesterolemia familiar homocigota, más rara y grave. Aquí, el paciente no hereda solo una copia del gen mutado, sino que recibe una de cada padre. Por eso, desde el nacimiento tiene niveles de colesterol LDL muy altos.

Hay que tratarlo de inmediato, pues de lo contrario ya en la infancia y en la adolescencia llegan a aparecer enfermedades cardiacas muy graves.

Hipercolesterolemia poligénica

Está causada por varios genes, contribuyendo cada uno al aumento del colesterol LDL. Se manifiesta de manera gradual y es hereditaria, por lo que suele haber antecedentes familiares de problemas de corazón y de colesterol alto.

Hipercolesterolemia secundaria

No viene relacionada con factores genéticos, sino que está provocada por factores externos o enfermedades subyacentes.

La vida poco saludable es uno de esos factores. Aquí hablamos de consumir comida con mucha grasa nada saludable, la falta de actividad física, la obesidad o el tabaquismo. Lo peor de esto es que no se suele dar solo una causa, sino que la mayoría de ellas se combinan en cada persona.

Otra causa tiene que ver con las enfermedades como la diabetes, el hipotiroidismo o las enfermedades renales. Estos problemas hacen que el colesterol “malo”, el LDL, aumente bastante sus valores.

Síntomas de la hipercolesterolemia 

Padecer hipercolesterolemia no causa síntomas directos. Por eso es una enfermedad tan peligrosa, ya que muchas personas no saben que tienen el colesterol alto hasta que no se hacen un análisis de sangre o desarrollan alguna complicación.

De hecho, los únicos síntomas visibles son los xantomas (depósitos de colesterol que aparecen como manchas amarillas en la piel) y los xantelasmas, manchas amarillas que se dan alrededor de los ojos.

hipercolesterolemia familiar

Tratamiento de la hipercolesterolemia

El tratamiento pasa por el cambio en los hábitos de vida. Esto comienza con una dieta para la hipercolesterolemia, baja en grasas saturadas y trans, con abundancia de frutas y verduras.

Hay que realizar todo el ejercicio que sea posible y perder peso si se padece obesidad. Además, si se es fumador al dejar de hacerlo aumentarán los niveles de colesterol bueno.

En ocasiones esto no es suficiente, por lo que a la vida saludable hay que añadir los medicamentos como las estatinas, que reducen el colesterol malo y aumentan el bueno.

Además, se usan los inhibidores de la absorción de colesterol, que consiguen que nuestro intestino no absorba todo el colesterol que ingerimos.

Tenemos más medicamentos, pero hay que hacer lo posible para controlar el colesterol sin ellos, pues tienen efectos secundarios.

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Prevención de la hipercolesterolemia

Podemos prevenir, al menos en la mayoría de los casos, tener el colesterol alto. Merece la pena el esfuerzo, pues así será más complicado que tengamos enfermedades del corazón, accidentes cerebrales, etc.

Una buena forma de prevenirla es mediante los análisis de sangre periódicos. Nuestro médico no tendrá inconveniente en hacernos analíticas una o dos veces al año, en las cuales veremos cómo va nuestro colesterol

A su vez, una dieta equilibrada ayudará mucho a prevenirla. Lo mejor es seguir la dieta mediterránea, la que ha sido la nuestra toda la vida. En ella debemos incluir pescado, aceites vegetales como el de oliva, carnes blancas, mucha fruta, grandes cantidades de verduras, etc.

El ejercicio será otra de las maneras de prevenir el colesterol alto. No es necesario apuntarse al gimnasio, ya que algo tan sencillo como correr, nadar, ir en bici o hasta caminar será más que suficiente.

Del mismo modo, si tenemos sobrepeso u obesidad hay que tomar cartas en el asunto. Perder peso es una de las mejores maneras de rebajar el colesterol.

Fuentes

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