Prevención, diagnóstico y tratamiento para el sida
Hoy en día tanto la ciencia como la sociedad han experimentado importantes avances en referencia a toda la información sobre el tema; causas, prevenciones y tratamientos para el Sida. Llegando incluso a crear el día Mundial del Sida, que se celebra cada 1 de diciembre, y consiguiendo remitir considerablemente el número de contagios en todo el mundo.
El Sida, síndrome de inmunodeficiencia adquirida, es un virus que durante muchos años ha causado temor en la sociedad. En los años 80 el contagio aumentó, debido al desconocimiento de sus causas y prevención, motivo por el que, afortunadamente, se intensificaron todos los estudios médicos y la concienciación social.
En Aegon Seguros estamos comprometidos en la lucha contra el Sida y, por ello, hemos querido crear este artículo. En él, podrás encontrar toda la información referente a este tema y eliminar miedos y tabús.
Adelante, infórmate y vive tranquilo.
Índice
¿Qué es el Sida o VIH?
El VIH es un virus perteneciente al grupo de los ARN. Es decir, que su material genético no se encuentra en el ácido desoxirribonucleico (ADN) sino en el ácido ribonucleico (ARN).
Para que sea más sencillo de entender, el VIH es un virus que afecta a todas aquellas células que se encargan de protegernos de las diversas enfermedades. Altera nuestro sistema inmunitario, es decir, este virus elimina todas nuestras defensas y permite que cualquier enfermedad pueda hacerse un hueco en nuestro organismo. Una vez esto ha sucedido, es cuando se dice que la persona tiene el Sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida). Por lo tanto, es cuando el virus ya se ha instalado y se ha desarrollado, eliminando las defensas y dejando paso a los síntomas de las infecciones o tumores que han conseguido desarrollarse. Es posible que pasen años hasta que el virus VIH debilite el sistema inmunitario hasta tal punto de convertirse en SIDA
De ahí la necesidad de iniciar, cuanto antes, con el tratamiento para el Sida.
Causas
El VIH se transmite de una persona a otra a través de la sangre o por contacto sexual. Es decir; sangre, semen, fluidos vaginales y leche materna.
El virus puede introducirse en el organismo por el recto, la vagina, el pene, la boca y las mucosas. Aunque también puede producirse la transmisión vertical, que es la que se transmite de madre a hijo durante el proceso de gestación y nacimiento. También puede transmitirse por contacto con sangre infectada y por inyectarse drogas o compartir agujas.
¿Cuáles son los síntomas del VIH?
Para saber si una persona se ha contagiado con el VIH, la única forma de poder saberlo con certeza es realizando una prueba específica realizada por los profesionales sanitarios. Hasta que no se obtengan estos resultados, es imposible saber si se ha producido la infección.
Aun así, entre el 50 y 90% de las personas contagiadas, han experimentado síntomas similares a los de un catarro o leve gripe en un plazo de entre 2-4 semanas después de que el virus entre en nuestro organismo. Es lo que se llama infección primaria del VIH, que puede durar semanas. Algunos de los síntomas mencionados son: cansancio, fiebre, pérdida de apetito e incluso, en algunos, diarrea, sudoraciones nocturnas o aumento de los ganglios linfáticos. Otros como dolores musculares, tos, pérdida de peso, cefaleas, fiebre también son comunes. Los síntomas pueden ser muy leves aunque la carga viral (virus en la sangre) en este primer proceso es muy alta. También es probable que surjan herpes zóster o infecciones por cándida en la boca.
No todas las personas que están infectadas presentan la enfermedad, pero sí es muy frecuente que la mayoría acabe desarrollándola en un plazo de cinco o 10 años.
Diagnóstico
El diagnóstico precoz es fundamental para poder iniciar con el tratamiento para el Sida. Aunque, como hemos dicho, no existe una cura definitiva, si se han conseguido crear los medicamentos que pueden retrasar la aparición de los síntomas patológicos.
La prueba diagnóstica puede ser rutinaria y cualquier médico puede solicitarla. Dicha prueba, en realidad, consiste en la búsqueda de los anticuerpos que se han producido y que aparecen si el organismo está intentando luchar contra el virus. Tras el contagio, se puede tardar entre un mes y seis semanas en producir suficientes anticuerpos para poder detectarlos.
Otras pruebas que se pueden realizar son:
- Pruebas de antígenos y anticuerpos en sangre
- Pruebas de acido nucleico (buscan carga viral en sangre)
Tratamientos actuales para el sida
No existe una cura, todavía, para el VIH, pero sí que existen tratamientos para el Sida que ayudan a retrasar los síntomas de la enfermedad y disminuir su posibilidad de contagio.
Todas las medicaciones anti-VIH funcionan perfectamente, pero, como todo, pueden tener efectos secundarios y, además, presentar limitaciones importantes. En primer lugar, bajo ningún concepto eliminan el virus totalmente, solo lo controlan. Y, por otro lado, con el tiempo aparecen resistencias a los propios medicamentos.
Para evitar las resistencias, desde el año 1996 se lleva a cabo la terapia antirretroviral altamente activa.
El tratamiento para el sida antirretroviral (TAR) consiste en la mezcla de medicamentos contra el VIH para poder tratar la infección. Cada fármaco o medicamento bloquea al virus de una forma distinta, por lo que debe tomarse todos los días, a la misma hora, y sin obviar ninguna toma para que sean realmente efectivos.
Es fundamental empezar con este tratamiento cuanto antes, ya que, aunque no cura ni el elimina el virus, sí que pueden ayudar a que las personas infectadas puedan tener una vida más larga y sana.
Además, la toma de este tratamiento reduce la concentración del virus en la sangre, lo que lo convierte en casi indetectable, y así el riesgo de contagio de una persona infectada durante las relaciones sexuales es muy improbable.
Medicamentos para el tratamiento del sida
Los medicamentos antirretrovirales se dividen según su mecanismo de acción.
- Inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de los nucleósidos (ITIN). Bloquean la transcriptasa inversa, necesaria para que el VIH pueda reproducirse.
- Inhibidores de la proteasa (IP). Bloquean la proteasa del VIH, necesaria que el virus pueda reproducirse.
- Inhibidores de la fusión. Impiden que el VIH penetre en los linfocitos (células) CD4 del sistema inmunitario.
- Antagonistas de CCR5. Bloquean los correceptores de CCR5 en la superficie de los linfocitos CD4 que necesita el VIH para penetrar en ellos.
- Inhibidores pos fijación. Bloquean los receptores CD4 en la superficie de ciertos inmuncitos que el VIH necesita para entrar a las células.
- Potenciadores farmacocinéticos. Incrementar la eficacia de un medicamento contra el VIH incluido en un régimen contra ese virus.
Nuevos tratamientos para el sida
La lucha contra el Sida sigue imparable, intentando encontrar la cura definitiva para por erradicar este virus. Por ello, los estudios siguen avanzando y, los últimos descubrimientos llevados a cabo se centran en la liberación retardada de fármacos como cabotegravir, o rilpivirina que, mediante técnicas de nanotecnología, podrían administrarse por vía subcutánea cada dos o tres meses. Aunque todavía están en fase experimental, ayudarían mejoraría la calidad de vida del paciente y favorecería su adherencia al tratamiento.
También se están produciendo novedades en los antirretrovirales. Consisten en la formación de cócteles terapéuticos formados por tres moléculas para que puedan reducirse en una sola y que aliviaría la aparición de efectos adversos en los enfermos.
Prevención
La prevención es clave para evitar el contagio y, por supuesto, es necesario concienciar a la sociedad de la necesidad de llevar a cabo buenas pautas preventivas.
Los métodos anticonceptivos, como los preservativos, son esenciales para evitar el contagio durante las relaciones sexuales. Así como no compartir agujas ni materiales en el consumo de drogas.
Además, tal y como indica la FLSIDA, la detección precoz y el seguimiento del tratamiento es fundamental para evitar nuevas infecciones.
Recuerda, desde el 1 de noviembre de 2019 Sanidad financiará la pastilla PrEP, pastilla como medida de prevención del VIH en personas de alto riesgo.
Desde Aegon Seguros queremos velar siempre por tu bienestar y, por ello, te recomendamos que dispongas de un buen seguro de salud para poder controlar todos los aspectos necesarios para tu salud. Además, con nuestras pólizas de salud podrás acceder a diagnósticos avanzados. Llámanos e infórmate. Nuestros asesores te ayudarán a resolver todas tus dudas.
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