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Muelas del juicio: ¿A qué edad salen?

Dentista mostrando la anatomía de una mandíbula


Cuidar de la salud bucodental es tan importante como cuidar del resto de nuestro cuerpo. Y, por eso, conocer cuáles son las piezas que conforman nuestra dentadura, es tan importante. Las muelas del juicio forman parte de ella y, a continuación, desde Aegon, te explicamos cuál es su función, los síntomas asociados, la edad en la que suelen aparecer y si es necesario, o no, extraerlas y en qué situaciones. 

¿Qué son las muelas del juicio?

Las muelas del juicio, también conocidas como terceros molares o cordales, suelen surgir entre los 18 y 21 años. Están ubicadas en la parte trasera de la boca y, a menudo, estas muelas no tienen suficiente espacio para salir completamente, lo que puede provocar problemas como infecciones y dolor intenso en la zona. 

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La extracción de estas piezas es común cuando surgen complicaciones, siendo esta la solución principal para aliviar los síntomas y prevenir futuros problemas dentales.

¿Para qué sirven las muelas del juicio?

Las muelas del juicio, en la actualidad, carecen de función práctica en la masticación y la estética dental. Se consideran restos anatómicos de épocas en las que una dieta más ruda requería dientes adicionales. Sin embargo, en la evolución humana, las mandíbulas se han reducido, mientras que el número de dientes permanece constante, lo que hace que en algunas personas no quede espacio suficiente en la encía para que puedan salir correctamente.

Cuando salen, en ciertas ocasiones pueden no causar daño, especialmente si no afectan a los dientes adyacentes y sólo generan molestias temporales.

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¿Cuáles son los síntomas de las muelas del juicio?

Si experimentas molestias, es crucial determinar si se deben a las muelas del juicio, y para ello debes acudir al dentista en tus revisiones anuales o ante la aparición de dolor. 

Los síntomas comunes incluyen inflamación, infección o dolor localizado. Si sospechas que las muelas están saliendo, puedes revisar al final de las arcadas en busca de estas nuevas piezas dentales.

Las muelas del juicio pueden manifestar varios síntomas, incluyendo:

  • Fiebre
  • Encías inflamadas y enrojecidas 
  • Mayor sensibilidad y sangrado de las encías
  • Hinchazón y dolor en la mandíbula
  • Sabor amargo en la boca 
  • Dolor generalizado en los dientes
  • Mal aliento

¿A qué edad salen las muelas del juicio?

Estas piezas dentales son los últimos molares en aparecer, generalmente entre los 18 y 21 años, pero en algunos casos, puede ser que no salgan nunca. 

Cuando comienzan a salir, es recomendable visitar al odontólogo para obtener un diagnóstico inicial mediante radiografías que muestran su posición y si podrían causar problemas a otras piezas dentales.

Aunque existe la idea errónea de que siempre deben extraerse, esto no es cierto. Si las muelas del juicio no presentan complicaciones y tienen suficiente espacio para crecer sin riesgos de infección o daño a otras piezas dentales, no es necesario extraerlas.

Paciente en una clínica dentista

¿Qué pasa si no se sacan las muelas del juicio?

En muchos casos, las muelas del juicio no causan problemas y no requieren extracción. Sin embargo, cuando no hay suficiente espacio en la parte posterior de la boca, pueden convertirse en muelas del juicio impactadas o retenidas, lo que puede causar dolor, hinchazón o infección, y justificaría su extracción.

La extracción de las muelas del juicio puede aliviar los síntomas de los molares impactados y resolver problemas como dolor recurrente, abscesos o cambios en la mordida. Es importante considerar la extracción si se experimentan estos síntomas y el dentista lo considera necesario.

¿Por qué hay que sacar las muelas del juicio?

El dolor y la infección son los principales motivos por los que los pacientes acuden a la consulta dental para el tratamiento de las muelas del juicio. En casos de inclusión total, cuando las muelas están completamente cubiertas por la encía, pueden causar infecciones o quistes y dañar las raíces de otros molares. Teniendo en cuenta, además, que el dolor y malestar que padece la persona puede ser realmente molesto y desesperante.

En ocasiones, las muelas del juicio están parcialmente erupcionadas, lo que puede llevar a infecciones y problemas periodontales debido a la acumulación de bacterias, provocando dolor y procesos infecciosos.

Cuando las muelas del juicio tienen caries, generalmente no se realizan empastes y se recomienda la extracción, a menos que existan circunstancias específicas que lo justifiquen. La extracción de las muelas del juicio se realiza principalmente en pacientes jóvenes, antes de que se cierren completamente las raíces, lo que ayuda a minimizar problemas y complicaciones con el nervio dental.

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En pacientes con un alto compromiso del nervio dental, es recomendable realizar un TAC antes de la extracción para evaluar la situación con mayor precisión.

En situaciones donde el paciente está considerando un tratamiento de ortodoncia, surge la pregunta sobre si es necesario extraer las muelas del juicio, especialmente si no hay indicaciones de dolor, infección o caries.

Mantener una buena salud bucodental es esencial para ti y tu familia. La boca es una parte esencial de nuestro cuerpo y llevar a cabo una correcta limpieza y revisiones periódicas ayuda a que la salud se mantenga en buenas condiciones.

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Fuentes:

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