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Gastroenteritis: causas, síntomas y tratamiento

gastroenteritis

La gastroenteritis es sin duda una de las enfermedades más comunes. Esta infección intestinal se caracteriza por dolor en forma de cólico, episodios de diarrea líquida y/o nauseas o vómitos e incluso fiebre.

Generalmente son cuadros leves que no suelen necesitar medicación y que pasan tras varios días de dieta blanda.

Pero, en algunos casos estos cuadros si puede conllevar problemas más graves. Igualmente hay que saber diferenciar en su recuperación y tratamiento entre gastroenteritis vírica y la bacteriana. Lo explicamos.

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Gastroenteritis vírica

La gastroenteritis vírica es la más común y la más leve de todas. Aunque sus síntomas son muy similares a la bacteriana, la gravedad es menor.

Causas de la gastroenteritis vírica

Existen dos causas principales por las que se desarrollan gastroenteritis vírica:

  • El contacto con otra persona infectada, ya que puede contagiarse por vía aérea además de por contacto.
  • Ingerir alimentos o agua contaminada. De ello hablamos con más detalle en nuestro artículo sobre intoxicaciones alimentarias.

Existen diferentes virus que pueden causar la gastroenteritis:

  • Norovirus: Es el más común en las enfermedades causadas por alimentos. Su propagación es mayor si se convive con una persona infectada en espacios cerrados. Por ello, una correcta ventilación es fundamental.
  • Rotavirus: Este virus afecta principalmente a los niños, especialmente a los bebes. De hecho, muchos adultos infectados no presentan síntomas. En los niños suele contagiarse por llevarse a la boca objetos contaminados con el virus o simplemente los dedos.

Síntomas de la gastroenteritis vírica

La gastroenteritis ataca los intestinos, desarrollando los siguientes síntomas:

  • Diarrea líquida, sin otros síntomas como sangre.
  • Dolor tipo cólico con calambres abdominales.
  • Náuseas
  • Vómitos
  • Dolor de cabeza y fiebre no muy elevada.
  • Fiebre no muy elevada
  • Más raros son otros síntomas como dolores musculares.

Estos síntomas suelen aparecer de uno a tres días después de contraer la infección y desaparecen en uno o dos días.

Solo en algunos casos como niños, personas mayores o inmunodeprimidas los síntomas pueden ser más graves y la duración mayor, en ocasiones hasta más de una semana.

Además, los síntomas de la gastroenteritis vírica como ya hemos señalado son similares a los provocados por bacterias, como Clostridium difficile, Salmonella y E. coli, e incluso algunos parásitos, por lo que es importante hacer un seguimiento si no hay mejoría.

Tratamiento de la gastroenteritis viral

No existe un tratamiento farmacológico para la gastroenteritis viral. Lo más eficaz es dieta blanda astringente y tener una correcta hidratación.

Es clave por todo ello la prevención destacando un lavado de manos frecuente y evitar el contacto con personas contagiadas.

Gastroenteritis bacteriana

Sus síntomas son muy parecidos a la gastroenteritis vírica con la diferencia de que su causa es una bacteria.

Causas de la gastroenteritis bacteriana

La causa principal es la ingesta de alimentos contaminados:

  • Carnes cuando están en contacto con bacterias en el momento de ser procesadas.
  • Frutas y verduras: en el momento de ser procesadas o lavadas con aguas contaminadas, o utensilios de cocina no limpios. Incluyen zumos no pasteurizados.
  • Productos lácteos o que contengan mayonesa.
  • Alimentos congelados refrigerados no conservados en la temperatura correcta.
  • Mariscos crudos.
  • Huevos mal cocidos. Puedes leer más en nuestro artículo sobre cómo saber si un huevo está malo o bueno.
  • Agua: es muy común en aguas no tratadas correctamente.

El número de bacterias que pueden causar gastroenteritis son muy variadas, entre las que están la Campylobacter jejuni, E coli, Salmonela, Estafilococos o Clostridium difficile.

Síntomas de la gastroenteritis bacteriana

Los síntomas de la gastroenteritis bacteriana dependen del tipo de bacteria que causó la enfermedad. El síntoma común es la diarrea líquida a la que se unen los mismos que en la gastroenteritis bacteriana:

  • Cólicos abdominales.
  • Pérdida de apetito.
  • Náuseas y/o vómito.

Si existen algunos síntomas diferenciales que alertan sobre la posibilidad de una gastroenteritis bacteriana:

  • Heces con presencia de sangre.
  • Fiebre moderada o alta.

En estos casos se suele analizar las heces para averiguar qué microorganismo está causando sus síntomas.

Tratamiento de la gastroenteritis

Al igual que la vírica, en la mayoría de los casos solo es necesario descansar un par de día, evitar la deshidratación y comer dieta blanda entre las que destaca:

  • Arroz cocido.
  • Carnes blancas de pollo o pavo.
  • Pescado blanco como la merluza, pescadilla o bacalado.
  • Jamón cocido.
  • Tortilla, bien cuajada.
  • Patata y zanahoria.

Por el contrario, no hay que comer con gastroenteritis:

  • Cereales ricos en fibra.
  • Legumbres.
  • Chocolate.
  • Leche y productos lácteos.
  • Productos de pastelería y repostería.
  • Embutidos.
  • Alimentos grasos o fritos.
  • Fruta con piel.
  • Verde hoja verde, alimentos grasos o fritos, alimentos encurtidos o picantes

Es muy importante controlar la hidratación. En caso de no poder hacerlo porque no se corten los episodios de diarrea y/o vómitos puede ser necesario que se le hidrate por vía subcutánea.

Solo en algunos casos es conveniente el uso de antibióticos: si la diarrea es muy intensa o tiene algún problema de salud adicional, como tener un sistema inmunitario debilitado.

Factores de riesgo

Aunque la gastroenteritis es una enfermedad muy común existen grupos más propensos y de mayor riesgo:

  • Niños pequeños: especialmente cuando están en guardería o en las primeras etapas de educación obligatoria.
  • Adultos mayores: por tener un sistema inmunitario más débil.
  • Personas inmunodeprimidas: por su menor resistencia a cualquier tipo de infección.

En el caso de la gastroenteritis vírica, tanto por rotavirus como norovirus, son más activas entre otoño (octubre) y arranque de primavera.

Prevención de la gastroenteritis

La mejor manera de combatir la gastroenteritis está en la prevención. En el caso de los niños de corta edad una de las opciones es la vacuna para el rotavirus. Esta vacuna no evita la gastroenteritis, pero si previene los síntomas más graves.

Para casos generales hay que seguir unas pautas de higiene:

  • Lavar bien las manos: especialmente tras ir al baño, usando agua tibia y jabón y frotándose durante al menos 20 segundos por todas las partes. Si no es posible, lleva gel hidroalcohólico o toallitas higieniezantes.
  • Evita compartir objetos de menaje y limpieza: como platos, cubiertos, toallas, etc.
  • Desinfecta las partes duras de la casa: especialmente si alguien ya está sufriendo un episodio de gastroenteritis.
  • Ten una correcta ventilación en las habitaciones.

Aumentar las precauciones cuando se viaja

Las gastroenteritis son muy comunes cuando se viaja. La alimentación o el acceso del agua puede ser más deficiente, por ello puedes seguir estos consejos:

  • Bebe solo agua embotellada: asegúrate que esté correctamente precintada.
  • Evita las bebidas con cubitos de hielo.
  • Usa el agua embotellada para el lavado de dientes.
  • Evita los alimentos crudos, como frutas o ensaladas.
  • Si comes carne o pescado asegúrate que estén bien cocinados.

Cuando contactar con un médico

Como hemos señalado la gastroenteritis mejora en las primeras 24 horas y suele desaparecer en las siguientes 48 horas. No obstante, debes consultar con un médico si se producen algunos de estos síntomas:

  • No se consigue retener líquidos en el estómago tras 24 horas de gastroenteritis.
  • Hay signos de deshidratación, en el caso de los bebés hay que comprobar si el pañal está húmedo.
  • Los vómitos duran más de un día.
  • Hay sangres en vómitos y/o en heces.
  • Fiebre elevada, por encima de 39º C.

La gastroenteritis siendo muy común debe ser siempre vigilada, en la mayoría de los casos no es necesario tratamiento médico, pero sí hay que prestar especial atención en algunos casos, principalmente en colectivos vulnerables ¡Esperamos que este artículo te haya sido de ayuda!

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Redactor Salud y Consumo

Licenciado en ADE por la Universidad Autónoma de Madrid y especialista en comunicación por la Universidad Complutense, lleva desde el año 2002 escribiendo sobre temas de consumo, salud y divulgación en general, tanto en revistas escritas como Dinero y Salud, asociaciones y diversas páginas web. Además de ser colaborador en medios escritos (Expansión, Cinco Días, idealista.com, El País, Libertad Digital, El Confidencial,…) Radio (COPE, Onda Cero, Cadena Ser, Onda Madrid…) y Televisión (Telecinco, Antena 3, Telemadrid…).

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