Etapas de desarrollo del lenguaje en los niños
Enlace copiadoSi hay un aspecto en el que nos diferenciamos claramente de otras especies es en el lenguaje y su aportación como principal vehículo de comunicación. Por ello, prestamos especial relevancia al desarrollo del lenguaje en los niños.
Muchas veces nos enfrentamos a tópicos contradictorios, que van desde exigir al niño que adquiera esta habilidad pronto, al contrario, a “despreocuparse” porqué “cada niño tiene su ritmo”.
Y es que, aunque el desarrollo del lenguaje verdaderamente varíe en cada niño, también es cierto que hay que ir cumpliendo diferentes etapas y que del análisis de cada una ellas se pueden anticipar problemas, como los auditivos, y poner una más fácil solución.
Índice
El desarrollo del lenguaje en la niñez
La facilidad que tienen los niños para el desarrollo del lenguaje de forma innata ha generado amplios estudios, en un área de trabajo que sigue progresando.
Así sabemos dos cosas. La primera, es que el cerebro está más predispuesto para el aprendizaje hasta los 7 años. Esto permite que cuando son pequeños tengan tanta facilidad para aprender distintos idiomas.
La segunda es que hasta los tres años es cuando es el periodo más intenso para desarrollar el lenguaje y el habla.
Por ello, es precisamente el desarrollo del lenguaje de 0 a 3 años la etapa básica en la que hay que ir cumpliendo una serie de etapas.
Etapa prelingüística (0 a 12 meses)
Aunque muchas veces no le prestamos una gran atención en esta primera etapa, creyendo que el peso del desarrollo del lenguaje es posterior, en estos primeros meses se desarrollan hitos muy relevantes.
De 0 a 6 meses
Esta etapa es esencial porqué los niños empiezan a emitir sonidos y también a interpretar los que escucha a su alrededor, así:
- Emite sonidos, no solo llanto, también risas, gorjeos y gritos.
- Tiene sensibilidad ante el ruido.
- Empieza a diferenciar sonidos, como la voz de sus padres.
- Los sonidos generan atención visual.
- Empieza a interactuar con el lenguaje, emitiendo respuestas a estímulos en forma de sonido.
De 6 a 12 meses
Su interactuación es mucho mayor y ya no solo reacciona ante sonidos, sino que las comprende e incluso comienza a comunicarse.
- Comienza a repetir sonidos.
- Responde ante ciertos sonidos y palabras, desde su nombre a un “no”.
- Se divierte con canciones o juguetes que emiten sonidos.
- Comienza a comunicarse, aunque de forma aún muy incipiente, como cuando indica con gestos y sonidos que quiere algo.
- Realiza sonidos vocálicos, el laleo, como “mamama” o “papapa”.
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Etapa lingüística (de 1 año a tres años)
A partir de un año el crecimiento en las habilidades del lenguaje es exponencial. Se pasa en poco tiempo de usar lenguaje no verbal acompañado de las primeras palabras.
De 12 a 18 meses
Estos seis meses se caracterizan por la mayor capacidad comprensiva, muy por encima de la expresiva, aunque ya empieza a pronunciar sus primeras palabras en un contexto adecuado:
- Responde a cuestiones sencillas con lenguaje no verbal.
- Pronuncia pequeñas palabras como “mamá” o “papá” dentro de un vocabulario que no llega a las 10 palabras.
- Balbucea otras palabras, pero aún no se entienden correctamente.
- Empieza a utilizar palabras para definir objetos.
- Imita palabras sencillas, aunque con una pronunciación poco clara (leche como “cheche”).
De 18 meses a 24 meses
Se producen un cambio cuantitativo, amplía las palabras de su vocabulario, como cualitativo con una pronunciación mucho más clara.
- Pronuncia sin errores todas las vocales y los fonemas más sencillos.
- Comienza a pronunciar sonidos más complejos usando la lengua
- Suele utilizar la tercera persona para referirse a sí mismos.
- Emite onomatopeyas para referirse a transportes o animales.
- Los errores de pronunciación disminuyen.
- Su vocabulario se amplía a unas 50 palabras.
De 24 a 36 meses
Su vocabulario se enriquece enormemente, situándose entre 300 y 1.000 palabras, comienza a hacer preguntas y enunciados simples:
- Desarrolla el lenguaje telegráfico sin determinantes y verbos (más galletas, jugar parque,…).
- Comienza a usar las inflexiones y realizar preguntas simples (¿Por qué?)
- Empieza a usar el plural.
- Desarrolla enunciados simples.
- Conoce algunos conceptos y a usarlos con propiedad (“grande”, “pequeño”).
- Es más preciso a la hora de hablar disminuyendo los errores en pronunciación.
- Utiliza con propiedad pronombres como “tú”, “él” ….
Aunque la “explosión” más importante en el desarrollo del lenguaje se produce especialmente en la etapa anterior, entre los 3 y los 4 años se produce una consolidación importante en el desarrollo lingüístico. Esta se refleja especialmente en el intercambio de conversaciones con la familia u otros niños.
- Sus enunciados son muy largos.
- Los problemas de pronunciación disminuyen casi totalmente.
- Empieza a utilizar el gerundio.
- Realiza descripciones.
- Expresa sentimientos e ideas.
- Hace uso correcto de la gramática.
- Sus preguntas, aún sencillas, empiezan a ser más concretas.
- Interacciona entre personas.
¿Cómo se producen las etapas de desarrollo del lenguaje?
Aunque este esquema de desarrollo de las etapas del desarrollo del lenguaje se repite en todos los casos, si puede existir diferencias a la hora de como se realiza este progreso.
Así, existen diferentes factores que pueden afectar positiva pero también negativamente al desarrollo del lenguaje en niños:
- Biológicos: diferencias fisiológicas que pueden dificultar la pronunciación de ciertas palabras.
- Sociales: su mayor o menor relación con otras personas.
- Familiares: que le proporcionen más o menos estímulos.
- Afectivos: especialmente maternos, que sirven para activar el lenguaje.
Los estimulos positivos no solo sirven para que los niños incorporen más elementos al lenguaje, también lo hacen ganando seguridad en esta interactuación y por ello quien lo recibe consigue como norma general hablar antes.
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Pero incluso en mismos entornos y con estímulos muy parecidos un niño puede desarrollar el lenguaje de forma diferente. Esto no quita que hay que vigilar estas etapas y detectar lo antes posible posibles trastornos en el desarrollo de lenguaje para buscar soluciones. Intervenir de forma temprana en estos posibles problemas de la mano de profesionales ayuda a corregirlos con mayor facilidad y que se vayan cumpliendo con normalidad todas las etapas del desarrollo del lenguaje.
