Trucos para aislar la casa del frío
El ahorro energético debe ser una prioridad para todos por diversas razones, tanto económicas como medioambientales. Buscar formas de favorecerlo, como por ejemplo trucos para aislar la vivienda, debe estar entre nuestras tareas.
En muchas ocasiones, ponemos énfasis exclusivamente en el consumo, proponiéndonos ahorrar energía. Por el contrario, se presta menos atención a hacer un uso más eficiente y a evitar la pérdida del calor o el frío. Conseguir mantener esa temperatura deseada, te ayudará a consumir menos recursos y, por tanto, abaratar tu factura.
Puede que te asuste la inversión que conllevará aislar la casa del frío y del calor. Sin embargo, a través de los diferentes trucos para aislar la vivienda que te contaré a continuación, no tardarás mucho en amortizarla. Podrás aumentar el confort del hogar gastando menos en tu factura y, encima, cuidar del medioambiente haciendo un consumo responsable de la energía.
Índice
Aislar la casa del frío para ahorrar calefacción
Una rehabilitación térmica es muy rentable. Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), una obra de aislamiento se amortiza en un plazo de entre 5 y 7 años, inferior en situaciones como la actual con el coste de la energía disparado. Es más, teniendo en cuenta la vida útil de los materiales de aislamiento, se recupera la inversión en más de 8 o 9 veces.
Aislar la casa del frío te permitirá ahorrar en la factura de la calefacción en invierno y en aire acondicionado en verano, al disminuir las pérdidas de calor o frío. Con todo ello se consiguen distintos beneficios:
- Mejorar el confort: esta mejora del bienestar se relaciona con mantener una temperatura agradable dentro de la vivienda.
- Ayuda al medio ambiente: un menor consumo de energía supone una reducción de la emisión de gases de efecto invernadero.
- Reduce la humedad y mejora el aislamiento acústico: por un lado, ayuda a tener la humedad ideal en casa disminuyendo la humedad indeseable por condensación y sus efectos sobre el hogar y la salud de sus integrantes. Por otro, reduce el ruido tanto interior, de otros vecinos, como exterior.
- Aumenta el valor del edificio: tanto si se va a alquilar como para una hipotética venta posterior.
Cómo aislar una pared
Si quieres saber cómo aislar una pared del frío de forma casera, sigue leyendo. En principio, cualquier pared es susceptible de ser aislada térmicamente, aunque hay que considerar cada caso, tanto por su técnica como por su coste.
En la tarea de cómo aislar una pared del frío de forma casera, puedes hacerlo de tres formas distintas:
- En la parte interior de las paredes
- En la parte exterior de las paredes
- Instalando material aislante dentro de los muros
Aislamiento interior
El aislamiento interior es lo que se denomina trasdosado y se puede hacer por diferentes vías:
- Autoportante: revestimiento con placas, generalmente de yeso, sobre una estructura de acero que se adosa a la pared
- Semi-directo: se fijan directamente los perfiles de yeso a la pared y sobre ellos las planchas aislantes
- Directo: se aplica directamente el aislante al muro
Hay que tener en cuenta que en todos estos casos el muro gana espesor y, por tanto, pierde superficie útil la vivienda.
Externo
No supone una pérdida de espacio dentro del hogar, pero está supeditada a permisos y, en caso de comunidades de vecinos, a que haya un acuerdo entre ambas partes. Se realiza principalmente por dos técnicas:
- Sistema de revestimiento SATE (Sistema de Aislamiento Térmico Exterior): se aplica un revestimiento de mortero aislante y mineral, consiguiéndose confort térmico en el interior y mejoras en impermeabilidad en el exterior
- Sistema de revestimiento por fachada ventilada: sobre una estructura metálica, se construye una pared aislante, dejando una cámara de aire que elimina los puentes térmicos a la vez que puede mejorar la estética del edificio
Aislamiento por dentro del muro
Tiene la ventaja de no tener que modificar la fachada y no perder tampoco superficie útil. Este sistema consiste en inyectar material aislante, generalmente espuma de poliuretano, en la cámara dentro de los muros. Es un sistema rápido, se realiza a través de una serie de taladros por los que se ejecuta la inyección. También es más económico y no requiere mantenimiento.
Trucos para aislar ventanas
El cambio de ventanas es también ventajoso económicamente, pero si no consideras esta opción, existen trucos para aislar ventanas que mejoran la eficiencia energética en esta zona tan sensible.
El primero de los trucos para aislar ventanas está en colocar burletes, especialmente útiles en sistemas de ventanas correderas. Este sistema, en cualquiera de los materiales que se puede comprar, protege de las corrientes de aire frío.
Las persianas también son fundamentales, no solo para controlar la luz, sino también como aislante térmico. Escoger una buena persiana ayuda a mantener la temperatura, especialmente en la noche, momento de mayor pérdida de calor en invierno en el hogar.
Por último, uno de los trucos para aislar ventanas está en las cortinas. En países que no se usan las persianas, son más comunes las cortinas gruesas, precisamente por esta razón. El grosor, el material y sus medidas son fundamentales para frenar las corrientes de frío.
Otras medidas para mejorar el aislamiento de la casa
Las ventanas y paredes no son las únicas fuentes de frío, el suelo es otro punto muy relevante en la pérdida de temperatura en el hogar. Uno de los trucos para aislar la vivienda es poner alfombras, que funcionan como barrera ante los cambios de temperatura.
Más allá de su efecto decorativo, es importante fijarse en el grosor, cuantas más fibras tenga, mejor. En este sentido, cobra importancia el material utilizado, siendo la lana el mejor aislante térmico.
También existen trucos para aislar la vivienda a través de los muebles, que sirven para mejorar la temperatura. Los colores oscuros atraen y mantienen más el calor natural y, en el caso de cabeceros o muebles murales, también ayudan a la no transmisión del frío de las paredes.
No debemos olvidarnos de las puertas, que en este proceso se convierten en nuestras aliadas. No solo hay que mantenerlas cerradas, también ver si es necesario instalar burletes bajo puerta para mejorar el aislamiento.
Por último, entre los trucos para aislar ventanas, destaca el uso del papel de burbujas por sus buenas propiedades aislantes térmicas. La aplicación es sencilla, tras recortar un trozo del tamaño del cristal, se debe pulverizar agua aplicando una capa fina. Sobre esta, se coloca el papel con las burbujas mirando hacia el interior.
En definitiva, ya sea de forma más definitiva o a través de trucos para aislar la vivienda, mantener la temperatura del hogar, especialmente en el invierno, nos permite ahorrar dinero sin sacrificar nuestro confort.
💡 Si tienes tu foco puesto en el ahorro en casa, te recomiendo visitar nuestro artículo sobre a qué presión debe estar la caldera, para optimizar su uso.
Espero que este post haya sido de tu interés, y sobre todo, que te sea útil. Recuerda seguirnos en redes sociales para más consejos similares. ¡Te esperamos!