Enfermedad del beso: ¿Qué es la mononucleosis y cómo se cura?
La mononucleosis infecciosa es comúnmente conocida como la enfermedad del beso. Es una enfermedad contagiosa, y según el último informe realizado por el portal de estadísticas Statista, sólo en el año 2019 se registraron, en España, más de 28.400 casos.
En este artículo vamos a explicarte todo cuanto debes saber sobre ella, en qué consiste, cómo se contagia y cuáles son los síntomas, riesgos y complicaciones que pueden aparecer.
¡Vamos a ello!
Índice
- 1 ¿Qué es la mononucleosis o enfermedad del beso?
- 2 ¿Qué causa la enfermedad del beso?
- 3 ¿Cuáles son sus síntomas de la mononucleosis?
- 4 ¿Cómo se diagnostica mononucleosis?
- 5 ¿Cómo se cura? Tratamientos
- 6 ¿Cuánto tiempo dura la mononucleosis?
- 7 ¿Puede presentar complicaciones?
- 8 ¿Cómo prevenir la mononucleosis?
¿Qué es la mononucleosis o enfermedad del beso?
La mononucleosis infecciosa es una enfermedad sistémica que, casi en el 90% de los casos, es provocada por el virus Ebstein- Barr, aunque en otras ocasiones la causa puede ser la infección por citomegalovirus, toxoplasma, rubeola o VIH.
Cualquier persona puede contagiarse y padecer la enfermedad del beso, sin importar sexo, raza o edad, aunque es mucho más frecuente en la etapa adolescente y en los niños.
¿Qué causa la enfermedad del beso?
El contagio de mononucleosis infecciosa, como hemos dicho, se lleva a cabo por la infección del virus Ebstein- Barr, el citomegalovirus, el toxoplasma, la rubéola o el VIH.
Se contagia a través de la saliva, principalmente por contacto directo, al besar a una persona infectada o en el intercambio estrecho de saliva compartiendo alimentos o bebidas.
¿Cuáles son sus síntomas de la mononucleosis?
Aunque en la mayoría de casos las personas infectadas son asintomáticas, los síntomas de la mononucleosis pueden ser, en función de cada paciente, los siguientes:
- Fiebre alta
- Malestar general
- Fatiga
- Cansancio
- Dolor de cabeza
- Somnolencia
- Dolor de garganta
- Pérdida del apetito
- Dolor muscular
- Rigidez en el cuello
- Inflamación de las amígdalas
- Inflamación de los ganglios linfáticos en las axilas y cuello
- Erupción cutánea
- Tos
- Dolor en el tórax
- Dificultad al respirar
- Sangrado nasal
- Fotofobia
- Urticaria
- Ictericia
- Inflamación del bazo
No todos los pacientes tienen los mismos síntomas. Algunos no tienen ninguno y otros algunos o casi todos ellos. Lo cierto es que, en función del avance de la propia enfermedad, pueden ir apareciendo desde los más leves hasta los más graves.
Aún así, es preferible que ante cualquier síntoma de que algo no funciona adecuadamente, el paciente acuda con urgencia a su médico de cabecera para que éste pueda hacer una revisión completa y diagnosticar el caso. Y, con la certeza de que se trata de mononucleosis infecciosa, proceder a la prescripción del tratamiento más conveniente.
¿Cómo se diagnostica mononucleosis?
El diagnóstico de la enfermedad del beso debe ser llevado a cabo por un médico. Ante la aparición de ciertos síntomas, cuando el paciente acude a consulta, el sanitario hará una exploración física para ver cuál es el estado general de salud de la persona. Teniendo en cuenta las explicaciones del paciente, el médico buscará signos de mononucleosis infecciosa en los ganglios linfáticos, en las amígdalas o incluso valorando si el hígado o el bazo están inflamados. También tendrá en cuenta, por supuesto, la duración de los síntomas que el paciente está explicando.
Con toda esta información, el médico decidirá si existen sospechas de que el paciente esté infectado y, para acabar de hacer un buen diagnóstico, solicitará un análisis de sangre.
Casi el 50% de los pacientes infectados tienen una elevación moderada de las transaminasas, también se buscarán anticuerpos heterófilos contra el virus Epstein Barr y se solicitará un recuento de los glóbulos blancos.
Pese a que los resultados no son 100% concluyentes para determinar que existe la infección de la enfermedad del beso, si son una buena guía para que el doctor, con todos los resultados y el examen físico, pueda dictaminar que el paciente padece dicha enfermedad.
¿Cómo se cura? Tratamientos
La mononucleosis infecciosa es una infección vírica y, por tanto, no existe un tratamiento específico que pueda curarla. Por ello, los médicos sólo pueden ayudar al paciente a controlar la enfermedad aliviando los síntomas que vayan apareciendo.
Algunos de los tratamientos que se prescriben son:
- Reposo
- Descanso
- Tomar mucho líquido
- Antiinflamatorios
- Antibióticos
- Antipiréticos
- Analgésicos para calmar el dolor
- Hacer gárgaras con agua caliente y sal para mitigar el dolor de garganta
- En casos más graves, se pueden prescribir corticoides
¿Cuánto tiempo dura la mononucleosis?
La mononucleosis infecciosa es una enfermedad auto-resolutiva, es decir, de por sí sola desaparece con el tiempo en un periodo de tiempo de entre 3 y 4 semanas, si no existen complicaciones.
El proceso de incubación de la enfermedad se desarrolla entre los 10 y los 50 días desde el momento en el que se ha entrado en contacto con la persona infectada y, una vez empiezan a aparecer los síntomas, éstos pueden durar entre 7 y 14 días.
La sensación de fatiga puede ser uno de los síntomas que más se alarguen en el tiempo, y la inflamación del bazo puede llegar a notarse hasta 3 meses después.
¿Puede presentar complicaciones?
El pronóstico de la enfermedad del beso, en la mayoría de casos, es favorable. Pero sí puede suceder que, en algunos pacientes, sobre todo en aquellos con un sistema inmune debilitado, se deriven complicaciones importantes.
Algunas de ellas pueden ser:
- En los casos más graves, puede provocar la muerte.
- Afectación al sistema nervioso
- Meningitis
- Parálisis facial
- Aparición de crisis epilépticas
- Ataxia
- Anemia
- Hepatitis
- Inflamación de los testículos en hombres
- Rotura de bazo
- Encefalitis
- Neumonía
¿Cómo prevenir la mononucleosis?
La mononucleosis es contagiosa, por lo que se recomienda la misma prevención que con cualquier otro tipo de enfermedad contagiosa. Es decir:
- Evitar el contacto con personas infectadas
- No compartir alimentos ni bebidas
- Las personas inmunodeficientes deben evitar cualquier tipo de contacto o interacción con los enfermos, al igual que las mujeres embarazadas
- El enfermo no puede donar sangre hasta que esté completamente recuperado
La mononucleosis infecciosa no debería provocar secuelas en los pacientes que mantienen una buena salud pero, de todos modos, es imprescindible acudir al médico cuando aparezcan síntomas que no sean normales para la persona. De este modo, se podrá llevar a cabo un buen diagnóstico, tratamiento y seguimiento por parte de los especialistas.
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Fuentes consultadas: