Enfermedades autoinmunes, cuáles son, en qué consisten y cómo se tratan
En circunstancias normales, nuestro sistema inmunitario nos protege contra infecciones y enfermedades. Pero no siempre ocurre así, en muchas personas su sistema inmunológico ataca a células sanas y tejidos sanos propios. En este caso estas personas estarían sufriendo enfermedades autoinmunes. A través de este artículo te explicamos con más detalle en qué consisten este tipo de enfermedades autoinmunes y repasamos algunos ejemplos.
Índice
¿Qué es una enfermedad autoinmune o enfermedad autoinmunitaria?
En una enfermedad autoinmune o enfermedad autoinmunitaria, se da una condición patológica por la cual el sistema inmunitario se convierte en el agresor que ataca al propio organismo, destruyendo a los propios órganos y tejidos corporales sanos. Y es que si bien lo normal es que el sistema inmune distinga lo propio de lo extraño, no siempre es así.
Las enfermedades autoinmunes afectan a muchas partes del organismo. Hay muchas dolencias de este tipo, de hecho, superan las ochenta, y tienen un origen desconocido. Muchas tienen dolencias y pautas comunes, siendo las mujeres son más propensas a sufrirlas, sobre todo en la madurez.
Síntomas de las enfermedades autoinmunes
Uno de sus principales problemas, hasta ahora, ha sido su diagnóstico. Por ejemplo, muchas enfermedades autoinmunes comienzan con síntomas muy genéricos. Algunos ejemplos de estos síntomas son:
- Dolores musculares
- Fiebre no muy alta
- Cansancio
- Dolor e hinchazón en las articulaciones
- Problemas en la piel y/o problemas digestivos.
Detrás de estos síntomas puede existir una dolencia grave y por ello su diagnóstico, basado en detectar la inflamación, es tan importante.
También son problemáticas por la forma en la que suelen incidir estas enfermedades que alternan periodos de inactividad y de vida normal del enfermo con otros de brotes, que pueden ser muy agudos. Estos brotes aparecen y desaparecen y pueden ser leves o intensos.
¿Qué factores influyen en las enfermedades autoinmunes?
Hay factores desencadenantes de las enfermedades autoinmunes.
Al componente hereditario pueden sumarse otros factores ambientales como:
- Infecciones
- Fármacos
- Vacunas o inmunizaciones
- Alimentos y deficiencias nutricionales
- Toxinas como el tabaco
- Agentes químicos
- Factores psicológicos
- Hábitos higiénicos, socioeconómicos, sanitarios y factores climáticos
Principales enfermedades autoinmunes
Aunque existen un listado de enfermedades autoinmunes muy extenso, muchas de ellas son similares, especialmente por las áreas del cuerpo a las que afectan y por tener una incidencia similar. Así, podemos agrupar las principales enfermedades autoinmunes en estos ejemplos:
Enfermedad inflamatoria intestinal
En este grupo están dos enfermedades de importante incidencia que afectan al tubo digestivo: la enfermedad de Crohn (lleva el apellido del médico que la describió por primera vez en 1932) y la colitis ulcerosa.
La enfermedad de Crohn afecta a cualquier parte del tubo digestivo, pero los casos más frecuentes afectan al intestino delgado y especialmente al íleon terminal, la parte que une intestino delgado con grueso. En momentos de brote causa dolor abdominal, diarrea con sangre, pérdida de peso y fiebre. Si no se sostienen los brotes el resultado del proceso inflamatorio pueden ser úlceras u obstrucción intestinal por acumulación de las cicatrices (estenosis). Los fármacos intentan paliar estas crisis para no tener que acabar con resección del intestino delgado, cirugía para extirpar o sacar una parte de este. Suele presentarse en gente joven 20-30 años, aunque se pueden manifestar en cualquier edad.
💡 Te damos más detalle sobre esta enfermedad en el artículo Enfermedad de crohn: causas, genética y nuevos tratamientos.
La colitis ulcerosa se asemeja mucho, pero en este caso la inflamación se produce en el colon (intestino grueso) y recto. También hay inflamación y ulceración de la pared interior y sus síntomas incluyen diarrea (a veces con sangre) y dolor abdominal, muchas veces agudo. Puede darse en cualquier edad, pero suele comenzar entre los 15-30 años.
Una colonoscopia con biopsia es fundamental para detectar estos procesos inflamatorios.
Artritis reumatoide
La enfermedad autoinmune de la artritis reumatoide afecta a las articulaciones. A diferencia de la osteoartritis (daño por desgaste) la artritis reumatoide afecta al revestimiento de las articulaciones y causa una dolorosa hinchazón que al final puede provocar erosión del hueso y deformidad de las articulaciones. Esta suele empezar de forma progresiva con dolor articular leve, rigidez y cansancio que se va agravando hasta hacer muy difícil la vida del paciente, incluso deformando rodilla, dedos de la mano o tobillos.
El resultado es, además del importante dolor, una limitación del movimiento y de la vida normal del paciente.
Psoriasis
La psoriasis es una efermedad autoinmune de la piel. Esta dolencia inflamatoria crónica afecta principalmente a la piel y se caracteriza por la aparición de lesiones rojizas escamosas principalmente en cuero cabelludo y en articulaciones como codos y rodillas.
La interrelación entre enfermedades autoinmunes hace que, por ejemplo, pacientes con enfermedades intestinales inflamatorias sufran de psoriasis y problemas en articulaciones y otros con psoriasis acaben con dolores articulares.
Como otras enfermedades autoinmunes se manifiesta en brotes con periodos de remisión y otros de empeoramiento. Es una enfermedad frecuente y crónica.
Celiaquía
Esta enfermedad autoinmune afecta al intestino delgado, como el crohn, pero, afortunadamente sí se conoce su desencadenante y se puede actuar contra él.
En este caso el intestino delgado reacciona con una inflamación de la mucosa como consecuencia de una intolerancia inmunológica de por vida al gluten de cereales como el trigo, cebada y centeno. Afecta al intestino delgado y altera la absorción de vitaminas, minerales y otros nutrientes de los alimentos, conllevando malnutrición, aunque se mantenga una ingesta adecuada.
La celiaquía produce dolor abdominal, episodios de diarrea o estreñimiento, fatiga y pérdida de peso. Se suele diagnosticar a través de un análisis de sangre, anticuerpos contra el gluten y posterior biopsia de la mucosa del intestino delgado.
Lupus
Es una de las enfermedades más complejas en cuando puede atacar a cualquier órgano (principalmente piel, articulaciones, riñones, cerebro, etc.) y como el resto, se presenta en forma de brotes.
Los síntomas del lupus dificultan su diagnóstico por ser muy variados:
- Desde dolores musculares y articulares (Principalmente en dedos, muñecas, codos y rodillas. Siendo frecuente la rigídez articular matutina)
- Pérdida de cabello
- Eritema en alas de mariposa: manchas rojas que afectan especialmente a la cara
El mayor peligro del lupus es si afecta a órganos internos como corazón o riñones. También se suele diagnosticar por la presencia de una serie de anticuerpos en la sangre.
Diabetes tipo 1A
En esta enfermedad autoinmune se ataca a las células del páncreas que fabrican la insulina, fundamental para que el organismo utilice la glucosa. Al no poder generar insulina se puede generar un trastorno de salud muy grave que se solventa a través de inyectarte la insulina que el cuerpo no produce.
A diferencia de otro tipo de diabetes esta suele aparecer en la niñez o juventud.
💡 Más información en nuestro artículo: Diabetes, qué es y los avances para llevar una vida normal.
Avances en el tratamiento de enfermedades autoinmunes
Buena parte de estas enfermedades autoinmunes surgen por brotes que pueden remitir. Otro punto común en muchas de estas dolencias es que generan inflamación, por lo que es muy común que se intenten paliar con el uso de corticoides que reducen la respuesta del sistema inmunitario a la vez que reducen la inflamación.
El principal problema es que el uso continuado de corticoides también genera problemas por sus efectos secundarios como tensión ocular (que puede derivar en glaucoma), retención de líquidos, presión arterial alta, aumento de peso y otros más graves como adelgazamiento de huesos (osteoporosis) y supresión de la producción de hormonas en las glándulas suprarrenales.
También, al intentar “frenar” el sistema inmunológico se reducen defensas y se es más propenso a tener infecciones de todo tipo. Esto lo comparte uno de los avances farmacológicos más importantes de estas dolencias, los tratamientos biológicos.
Tratamientos biológicos
En este caso, como su propio nombre indica se tratan de moléculas complejas derivadas de fuentes vivas que actúan de forma más precisa y con menores efectos secundarios que fármacos convencionales como corticoides y antiinflamatorios. El objetivo es regular la actividad inflamatoria bloqueando los desencadenantes de respuesta inflamatoria. Sus últimos desarrollos, en plumas auto inyectables están mejorando la vida de muchos de los afectados por estas enfermedades.
Todo un avance que nos debe recordar la importancia de cuidar nuestra salud de la mano de los mejores seguros de salud que ofrecen los mejores centros médicos y profesionales.