Luz azul: qué es, efectos en la salud y cómo protegerte

Vivimos en la era digital y eso nos comporta amplios beneficios pero también ciertos factores que, directa e indirectamente nos afectan a la salud.
La luz azul, por ejemplo, es dañina para nuestra salud. Por lo que hay que tomar medidas para protegernos de ella y así evitar que tenga un impacto negativo en la salud general de nuestro cuerpo.
En este artículo vamos a entrar en más detalle sobre la luz azul, qué es, qué efectos tiene sobre la salud y cómo protegernos ante ella.
Así que toma nota y ¡sigue leyendo!
Índice
¿Qué es la luz azul y de dónde proviene?
La luz azul es un tipo de luz con una longitud de onda corta. Ésta produce mucha energía y puede dañar a la visión de quienes la reciben.
De forma natural la produce la luz solar pero, además, también los dispositivos electrónicos como el móvil, la Tablet o el ordenador la emiten y, al vivir en la era digital, donde las pantallas forman parte de nuestro día a día, nos afecta muchísimo y se hace necesario tomar medidas al respecto.
Efectos de la luz azul en los ojos y el sueño
La luz azul provoca efectos negativos en la visión y en el sueño.
Uno de los inconvenientes de estar expuesto, por un tiempo prolongado, a la luz azul, es que puede causar fatiga ocular, así como sequedad en los ojos e irritación. Y, como consecuencia a todo ello, la persona puede padecer dolor en los ojos, visión borrosa, dolor de cabeza y ojos cansados.
Es por ello que se recomienda utilizar gafas de luz azul al utilizar las pantallas y así poder disminuir los efectos de la exposición a largo plazo.
Por otro lado, otro de los problemas que puede provocar es una afectación en el sueño, pues la exposición a la luz azul puede afectar en la producción que hace el cuero de forma natural de melatonina, que es la hormona del sueño.
Si la exposición se lleva a cabo en las horas previas a dormir, esto puede tener consecuencias sobre los ritmos circadianos, lo que impide que podamos conciliar el sueño adecuadamente y, además, no descansemos correctamente.
Por ello se recomienda no utilizar ningún tipo de aparato que emita luz azul antes de ir a dormir, por lo menos durante las 2 horas previas.
Anota estos 11 trucos y consejos para dormir mejor.
Cómo protegerte de la luz azul
Existen diferentes formas de protegerte de la luz azul que emiten los dispositivos electrónicos e incluso de la que emite la luz solar.
Para la luz solar, las gafas de sol son la mejor opción, pues están diseñadas para aliviar el efecto de la radiación del sol y de la luz azul.
Pero cuando nos ponemos delante de una pantalla, ya sea del móvil o del ordenador, por ejemplo, podemos utilizar diferentes elementos para protegernos:
- Gafas de luz azul
- Pantallas de filtro de luz azul
Además, podemos llevar a cabo ciertas medidas que facilitan que la luz azul no afecte a nuestra visión ni a nuestro sueño como, por ejemplo, reducir el tiempo de uso de las pantallas, ajustar el brillo de las mismas hasta encontrar el nivel de brillo que sea más adecuado y confortable o, por ejemplo, utilizar la regla 20-20-20. Ésta es una técnica muy fácil de utilizar que consiste en descansar la vista durante 20 segundos, cada 20 minutos de exposición, focalizando la visión a una distancia de 20 metros.
Gafas con filtro de luz azul: ¿realmente funcionan?
Pese a que, en la actualidad, no existen evidencias científicas que avalen que las gafas con filtro de luz azul sean realmente la mejor solución, sí que existen ciertos estudios que demuestran que utilizarlas aporta beneficios. Algunos de estos beneficios son la disminución de la fatiga visual, el estrés visual, la irritación o la resequedad de los ojos.

Pero lo cierto es que algunas personas no las pueden utilizar porque se marean, tienen dolores de cabeza o la sensación de que la vista se les cansa antes.
Por ello, es preferible disminuir el tiempo de exposición ante pantallas y, de este modo, evitar los efectos nocivos que provoca la luz azul.
La luz azul puede provocar problemas en la salud ocular y, por ello, es aconsejable tomar las medidas oportunas para disminuir la exposición. Pero, en el caso de que ya sea demasiado tarde, es imprescindible acudir al médico especialista para que éste pueda valorar la situación y determinar qué hacer según las necesidades de cada paciente.

En Aegon encontrarás el seguro médico privado que necesitas para poder ser atendido por el especialista que necesites en cualquier momento.
Fuentes: