Agnosia: Definición, tipos y causas
Los trastornos neurológicos conocidos como agnosias afectan significativamente la capacidad de conocer y comprender la información sensorial. Por tanto, la agnosia se refiere a los trastornos del reconocimiento de objetos causados por lesiones en el sistema nervioso central. Si este reconocimiento falla, el objeto puede ser visto, escuchado o tocado, pero no reconocido.
Definición de agnosia
La agnosia se puede definir como la incapacidad de reconocer el mundo que nos rodea a través de nuestros sentidos, incluso si estos sentidos no están afectados por una enfermedad o patología. No se trata de una enfermedad, sino de una anomalía, generalmente de origen neurológico porque, aunque los sentidos sigan funcionando correctamente, el cerebro es incapaz de recibir las señales que le envían en forma de olores, imágenes o sonidos específicos.
Podemos llamar a este trastorno un problema de percepción. Este resulta en un error en el reconocimiento de situaciones, personas u otros elementos que antes eran fácilmente reconocibles por las personas afectadas.
Es importante destacar que esta patología impide reconocer estímulos específicos que ya se habían aprendido e identificado. (Sin embargo, también puede generar dificultades en nuevos aprendizajes).
Otro elemento crucial es que no hay fallos sensoriales (los sentidos funcionan correctamente), sino que el problema radica en el registro y decodificación de la información proporcionada por los distintos receptores sensoriales. Como resultado, se produce un cambio a nivel cerebral.
Además, uno de los grandes problemas es que la persona no se da cuenta de que tiene esta anomalía.
Tipos de agnosia
La investigación científica ha identificado los siguientes tipos de trastornos:
- Agnosia visual: dificultad para reconocer personas y objetos. Está relacionada con la percepción visual. Existen dos categorías claramente separadas: Por un lado, aparecen las aperceptivas, en las que los pacientes tienen dificultades para categorizar objetos. Además, las personas asociativas tienen dificultades para identificar las situaciones que se ven.
La prosopagnosia (incapacidad para reconocer rostros o caras) o la acromatopsia (percibiendo todas las imágenes en blanco y negro) son algunas patologías específicas de estas deficiencias asociativas.
- Agnosia auditiva: dificultad para comprender música y lenguaje. Se relaciona con deficiencias en la interpretación de sonidos. Es posible distinguir dos grupos importantes:
- La agnosia auditiva verbal, también conocida como “sordera pura de las palabras”, se refiere a la dificultad para reconocer y decodificar el lenguaje y el habla de otras personas.
- La amusia incluye problemas con el reconocimiento y procesamiento de estímulos musicales.
- Agnosia táctil: dificultad para reconocer objetos y su posición a través del tacto. La incapacidad de reconocer objetos a través del tacto se conoce como astereognosia. La agnosia digital (un subtipo de esta afección) tiene un impacto principal en la codificación de la información que se recibe a través de los dedos de las manos.
Es común que se presente junto con otros trastornos significativos, como la agrafia (la imposibilidad de transmitir ideas a través de la escritura) o la acalculia (la alteración de las habilidades y el procesamiento matemático).
- Agnosia olfativa: impide que alguien identifique los olores, incluso si puede olerlos. Este trastorno es el resultado de una lesión en partes del lóbulo temporal del cerebro.
- Agnosia gustativa: falta de capacidad de percibir sabores. La agnosia gustativa impide que las personas reconozcan los sabores, aunque puedan percibirlos. Esto también se debe a lesiones en el lóbulo temporal, como la agnosia olfativa.
- Agnosia espacial: dificultades para orientarse y distinguir palabras escritas. La capacidad de una persona para orientarse, recordar lugares y rutas se ve afectada por su agnosia espacial. Pueden encontrar difícil entender su entorno espacial.
La heminegligencia es un subtipo de agnosia espacial en el que la persona ignora objetos o estímulos en un lado del campo visual opuesto a la lesión cerebral.
- Agnosia motora (apraxias): la incapacidad de recordar y ejecutar esquemas motores aprendidos de forma voluntaria es la principal característica de las apraxias. Estos mismos movimientos pueden ocurrir de manera espontánea, es decir, inconscientemente.
En cuanto a sus subcategorías, descubrimos:
- La apraxia ideacional es la falta de habilidad para crear secuencias de movimientos.
- La ideomotora se refiere a la incapacidad de responder a una orden verbal (como pedirle al paciente que levante los brazos).
- La constructiva (dificultades para crear formas o figuras).
- Agnosia corporal: aquí, el problema radica en la falta de capacidad para reconocer y reconocer el propio cuerpo. La asomatognosia es el nombre de este problema si se presenta en todas las partes del cuerpo humano. Sin embargo, en la hemiasomatognosia, esta deficiencia solo se presenta en una de las mitades del cuerpo.
Causas de la agnosia
El daño cerebral es la principal causa. Su aparición puede ser causada por cualquier trastorno que afecte al sistema cerebral.
Puede aparecer de manera repentina (si es el resultado de un traumatismo craneoencefálico o un accidente cerebrovascular) o, por el contrario, progresar lentamente, como si se desarrollan tumores o hay problemas de oxigenación cerebral. Las agnosias también pueden ser causadas por demencias y el uso de ciertas drogas.
Otros factores que pueden estar relacionados con el desarrollo de la agnosia son:
- Enfermedades neurodegenerativas: los trastornos como Alzheimer, demencia frontotemporal o Parkinson pueden tener un impacto en las áreas del cerebro que sirven para el reconocimiento sensorial.
- Accidentes cerebrovasculares: las interferencias en el flujo sanguíneo pueden dañar las zonas sensoriales.
- Epilepsia: durante las crisis, algunos tipos de epilepsia pueden causar agnosias temporales.
- Factores genéticos: que incluyen la predestinación genética en casos excepcionales.
- Enfermedades infecciosas: la encefalitis, una infección grave del sistema nervioso central, puede causar daño cerebral.
Tratamiento
Después de obtener un diagnóstico adecuado mediante la realización de las pruebas adecuadas (como tomografía computarizada, resonancia magnética nuclear y otras pruebas de imagen), es factible realizar una variedad de tratamientos para restaurar las habilidades afectadas, como, por ejemplo:
- Terapia de rehabilitación neuropsicológica: Aunque la agnosia no tiene una cura, la rehabilitación neuropsicológica puede ayudar a la persona afectada a mejorar su capacidad para procesar la información. Se puede enseñar al paciente estrategias compensatorias para manejar su condición en la vida diaria a través de ejercicios y técnicas específicas.
- Adaptaciones en el entorno: Cambiar el entorno de la persona para que sea más fácil para ella vivir la vida diaria es indispensable. Por ejemplo, una persona con agnosia visual puede beneficiarse de las etiquetas táctiles en objetos u organizaciones específicas en su casa para que pueda identificar fácilmente lo que necesita.
- Terapia ocupacional: Los terapeutas ocupacionales pueden ser de gran ayuda para que la persona pueda adaptarse a su condición y pueda desarrollar habilidades para realizar actividades diarias de manera independiente.
- Apoyo psicológico: El apoyo psicológico es muy importante para ayudar a la persona afectada y a su entorno familiar a lidiar con la agnosia, ya que la agnosia puede ser emocionalmente difícil y frustrante. Puede incluir terapia individual o de grupo, así como grupos de apoyo.
- Educación: Es fundamental informar al paciente y a su familia sobre la agnosia y sus efectos. Se puede reducir la frustración y facilitar la adaptación a los cambios necesarios en la vida diaria al comprender esta condición.
- Adaptaciones y ayudas tecnológicas: En algunos casos, las tecnologías adaptativas, como aplicaciones o dispositivos especializados, pueden ayudar a las personas con agnosia a comprender mejor su entorno. Las personas con agnosia pueden usar calendarios digitales, recordatorios y sistemas de asistencia vocal para facilitar su vida diaria.
Como has visto, la agnosia es una enfermedad que afecta negativamente la calidad de vida de las personas que la padecen. Es esencial identificarla a tiempo, evitar hacer autodiagnósticos y considerar posibles soluciones. Afortunadamente, en muchos casos, después de varios meses de terapia, especialmente en el ámbito ocupacional, es posible restaurar ciertas funciones.
El mejor método para prevenir el deterioro cognitivo es el envejecimiento activo.