¿Qué es la inteligencia emocional y cómo desarrollarla?
Enlace copiadoLa inteligencia emocional se puede definir como la capacidad que tienen las personas para reconocer tanto sus propios sentimientos como también los de las personas que les rodean, así como el conocimiento para manejarlos.
En este artículo definimos que es la inteligencia emocional, analizamos cómo son las personas que carecen de esta capacidad y damos consejos sobre cómo desarrollarla ¡Adelante, sigue leyendo!
Índice
¿Qué significa la inteligencia emocional?
Uno de los primeros en popularizar este término fue Daniel Goleman, psicólogo, periodista y escritor, con gran interés en las emociones y el cerebro. En 1995 publica su famoso libro: “La inteligencia emocional”, donde la define como la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de manejar adecuadamente las emociones.
La inteligencia emocional se divide en dos formas elementales: inteligencia interpersonal e inteligencia intrapersonal. La inteligencia interpersonal implica entender y comprender las emociones de los otros y tener la habilidad de reaccionar, mientras que la inteligencia intrapersonal implica entender y comprender las propias emociones, de tenerlas en cuenta al momento de tomar decisiones y ser capaz de regular las emociones según la situación.
La inteligencia emocional nos aporta habilidades como la autoconciencia, la motivación, el entusiasmo, el control de los impulsos, la empatía, entre otras. Por ello es esencial no solo en la vida personal, sino también en entornos profesionales y en la interacción social en general, pues permite a las personas manejar mejor sus relaciones, reducir el estrés, mejorar la comunicación y enfrentar dificultades de manera efectiva, así como ejercer un liderazgo adecuado.
La inteligencia emocional está muy relacionada con nuestro bienestar emocional, temática que tratamos en este vídeo de nuestra iniciativa #PrevenirEsCuidar. Una iniciativa que pretende inspirarnos a mejorar nuestro bienestar gracias a diversos micro consejos.
¿Cómo saber si una persona tiene inteligencia emocional?
Las personas emocionalmente inteligentes se caracterizan por tener adquiridas, a través del aprendizaje y el entrenamiento, las siguientes competencias.
Competencias personales
- Autoconciencia: es el gran pilar de la inteligencia emocional. A través de la autoconciencia las personas son capaces de reconocer lo que sienten en un determinado momento y poder así utilizar sus sentimientos como guía a la hora de tomar decisiones, basándose en una evaluación realista de sus capacidades.
- Autorregulación: nos permite mantener bajo control las emociones y/o impulsos conflictivos así como mantener un equilibrio en los momentos críticos.
- Motivación: nos ayuda a emplear las preferencias de cada uno para dirigirse a los objetivos personales. Ayuda a tomar la iniciativa así como a ser más eficaces y perseverantes cuando existen contratiempos.
- Empatía: se refiere a la capacidad de darse cuenta de lo que están sintiendo los demás; a la capacidad de comprender el punto de vista de la otra persona. Por tanto, ayuda a comprender a los otros, interesándose activamente por ellos. La empatía nos permite construir relaciones más positivas y duraderas con las personas de nuestro entorno. Las personas que desarrollan esta competencia suelen convertirse en líderes de manera natural ya que desarrollan la escucha activa y se anticipan a las necesidad de los demás.
- Habilidades sociales: Se refieren al manejo de las emociones en las relaciones, comprendiendo adecuadamente las diferentes realidades personales y sociales. Es importante saber tratar de forma adecuada y respetuosa no solo a nuestros familiares y amigos sino también a nuestros compañeros y superiores. Estas habilidades nos permiten interactuar con fluidez, buscar soluciones actuando como mediadores y/o como catalizadores de cambio. Las personas que desarrollan esta habilidad tienen una gran capacidad para liderar grupos.
¿Cómo es una persona con poca inteligencia emocional?
Las personas con baja inteligencia emocional tienen dificultades para expresar cómo se sienten y se sienten incapaces de reconocer emociones que generan malestar psicológico, como el miedo o la tristeza. También se caracterizan por tener baja autoestima y autosabotearse a sí mismas.
Una persona con poca inteligencia emocional, por ejemplo, puede tomar cualquier crítica a modo personal y no como una crítica constructiva. Pueden culpar a otras personas, a su suerte o a las circunstancias por su bajo rendimiento laboral. Es posible que no acepten sus defectos. Pueden ofrecer una gran cantidad de excusas para no hacerse cargo de sus responsabilidades personales y/o laborales. En casos extremos, la persona puede enojarse, desinflarse, desilusionarse y desmotivarse para trabajar. También para las personas con baja inteligencia emocional es fácil sucumbir a sus impulsos emocionales y tener una delicada salud mental.
Si quieres informarte más acerca de la importancia de cuidar nuestra salud mental, te dejo el artículo de la Organización Mundial de la Salud titulado “Salud mental“.
¿Qué hacer para desarrollar la inteligencia emocional?
Para desarrollar la inteligencia emocional, es fundamental trabajar en diferentes áreas clave que fortalecen esta habilidad. Aquí hay algunas estrategias efectivas para mejorar tu inteligencia emocional:
Autoconciencia
- Práctica de mindfulness: la atención plena te ayuda a estar presente en el momento actual, permitiéndote reconocer tus emociones y pensamientos sin juzgar.
- Autoevaluación: reflexiona sobre tus reacciones emocionales en diversas situaciones para identificar patrones y posibles desencadenantes.
Autorregulación
- Técnicas de relajación: aprende técnicas de respiración profunda, meditación o yoga para controlar el estrés y regular tus emociones.
- Gestión del tiempo: organiza tu día de manera efectiva para reducir la ansiedad y mejorar tu capacidad de autorregulación.
Automotivación
- Establecimiento de metas: fija metas realistas y significativas que te motiven a seguir adelante.
- Enfoque en lo positivo: practica el pensamiento positivo y la gratitud para mantener una actitud optimista.
Empatía
- Escucha activa: presta atención a los demás de manera activa, mostrando interés genuino en sus emociones y perspectivas.
- Ponerse en el lugar del otro: intenta comprender las emociones y puntos de vista de los demás, cultivando la conexión emocional.
Habilidades Sociales
- Comunicación asertiva: aprende a expresar tus emociones de manera clara y respetuosa, fomentando una comunicación efectiva.
- Resolución de conflictos: practica la resolución pacífica de conflictos, buscando soluciones que beneficien a todas las partes involucradas.
Al dedicar tiempo y esfuerzo a trabajar en estas áreas, podrás fortalecer tu inteligencia emocional y mejorar tus relaciones interpersonales, tu bienestar emocional y tu desempeño en diversas áreas de tu vida.
