Orzuelos: por qué salen y cómo tratarlos para que desaparezcan rápido

Lo primero que te preguntarás es exactamente ¿Qué es un orzuelo? El orzuelo es un bulto rojizo similar a un grano que aparece en el párpado. Y si has tenido uno alguna vez seguro que lo recuerdas, ya que suelen ser molestos y dolorosos. Generalmente aparecen como consecuencia de una infección bacteriana en la zona. Lo más habitual en la zona exterior del párpado, pero también pueden ubicarse en el interior (orzuelo interno).
Los orzuelos no suelen ser indicativo de una afección más seria. Tienden a remitir por sí solos a los pocos días, pero hay algunas cosas que puedes hacer para favorecer que desaparezcan y con ello su malestar.
Índice
Causas del orzuleo ¿Por qué salen?
Los orzuelos son causados por una infección bacteriana en una glándula sebácea o en un folículo piloso del párpado. El estafilococo suele ser la bacteria responsable en la mayoría de los casos.
Esta zona del ojo tiene entre otras funciones segregar lípidos para proteger la córnea. Pero como consecuencia de la infección la glándula no puede expulsar su contenido y se forma un bulto inflamado y doloroso.
Tocarse a menudo los ojos con las manos sucias puede facilitar el paso de las bacterias a tus ojos, haciendo más fácil que se produzca esta afección.
Otros factores y causas que aumentan el riesgo de orzuelo
Es importante que tomes precauciones para evitar estas otras causas que pueden derivar en un orzuelo:
- Ponerte las lentillas sin haberte lavado las manos o sin haberlas desinfectado
- Frotarte muy a menudo los ojos.
- No retirarte el maquillaje antes de dormir
- Utilizar productos de belleza en mal estado
- Haber tenido orzuelos con anterioridad
El orzuelo también puede estar provocado por una blefaritis, una inflamación crónica del párpado justo en la zona donde nacen las pestañas.
Asimismo, las personas con problemas comunes de la piel, como dermatitis o acné, pueden tener más predisposición a padecerlos.

¿Puede salirte un orzuelo interno?
Existen varios tipos de orzuelos. Estos se clasifican según el lugar en el que aparezcan, por lo que hay internos y externos.
- Orzuelos externos: se ubican en el borde exterior del párpado y son mucho más comunes. En la mayoría de casos comienzan en un folículo de las pestañas.
- Orzuelos internos: suelen darse en una glándula meibomio, que son glándulas sebáceas ubicadas en el interior del párpado. Pueden resultar más dolorosos al generar molestias en el ojo a medida que el bulto se inflama.
Si bien lo más frecuente es tener un solo orzuelo, puede darse el caso de que la infección afecte a la vez a ambos ojos.
Síntomas de los orzuelos: cómo diferenciarlo de otras afecciones
A veces, sin embargo, se confunden los orzuelos con otro tipo de afecciones oculares que generan inflamación.
Los síntomas del orzuelo incluyen:
- Dolor en el párpado
- Hinchazón del párpado con un bulto similar a un grano
- Lagrimeo
En cambio, no será un orzuelo si:
- El ojo o el párpado están hinchados, enrojecidos y llorosos, pero no hay bulto. Lo más probable es que se trate de conjuntivitis o blefaritis.
- El bulto es duro y similar a un grano pero no muy doloroso. En este caso podría tratarse de un chalazión.

Tratamiento del orzuelo
En la mayoría de casos un orzuelo no requiere tratamiento médico y se irá por sí solo en unos días. Aunque puedes hacer algunas cosas para aliviar la inflamación y favorecer que desaparezca.
Para ayudar a curar el orzuelo pon un paño limpio en agua tibia y sujétalo contra tu ojo durante unos 5 a 10 minutos. Repite este gesto varias veces al día.
También es aconsejable que evites usar lentes de contacto y maquillaje en los ojos hasta que el orzuelo se haya curado.
Y muy importante, nunca intentes reventar un orzuelo, ya que podrías favorecer que la infección se propague por el ojo.
Sin embargo, puede haber ocasiones en las que se requiera acudir al médico.
Si el orzuelo no comienza a mejorar pasadas 48 horas o el enrojecimiento e hinchazón afecta a todo el párpado y se extiende a otras partes de la cara, la Clínica Mayo aconseja consultar con personal sanitario.
En estos casos es posible que el médico te recete algún tipo de antibióticos:
- Gotas antibióticas o un ungüento tópico para ponerte en el párpado.
- Antibióticos en pastillas si el orzuelo se ha extendido más allá del ojo.
En raras ocasiones también puede recurrirse a cirugía destinada a “aliviar la presión”. Este proceso consiste en un pequeño corte con el que ayudar a drenar el pus, ayudando a que el orzuelo desaparezca.
