Salud mental en adolescentes
La salud mental en los adolescentes es un tema de vital importancia en la sociedad actual. Con el avance de la tecnología y la presión social, cada vez más jóvenes se enfrentan a desafíos emocionales y mentales que pueden afectar su bienestar general.
La Organización Mundial de la Salud señala que: “la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”, y la salud mental es “un estado de bienestar en el que la persona realiza sus capacidades y puede hacer frente al estrés normal de la vida, trabajar de forma productiva y contribuir a su comunidad”.
Índice
¿Qué es la salud mental para adolescentes?
La capacidad colectiva e individual de pensar, expresar sentimientos, interactuar con los demás, ganar el sustento y disfrutar de la vida depende de la salud mental y el bienestar.
La salud emocional, psicológica y social están relacionadas con la salud mental. Tiene un impacto en cómo pensamos, sentimos y actuamos cuando afrontamos los eventos de la vida. Además, influye en cómo manejamos el estrés, interactuamos con los demás y tomamos decisiones.
Muchas enfermedades o trastornos mentales afectan los procesos afectivos y cognitivos, el estado de ánimo, el pensamiento y el comportamiento. Cuando estos síntomas persisten a largo plazo, causan estrés en la persona y le impiden funcionar de manera normal, pueden convertirse en una enfermedad mental.
Las enfermedades mentales suelen aparecer en la adolescencia con comportamientos extraños, cambios en el estado del ánimo, fracaso escolar, aislamiento, problemas alimenticios, etc. Algunos de estos síntomas pueden estar confundidos con comportamientos adolescentes, lo que dificulta su detección.
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¿Cuáles son los principales problemas de salud mental en adolescentes?
Algunos de los trastornos mentales más comunes en la etapa adolescente son:
- Trastornos del estado de ánimo: Caracterizados por alteraciones emocionales, que consisten en periodos prolongados de exaltación o euforia excesiva (manía), o ambas. La manía y la depresión son dos extremos de los estados de ánimo. El trastorno bipolar y el trastorno depresivo mayor son los más comunes.
- Trastornos psicóticos: Son un trastorno mental grave que se caracteriza por una alteración general de la personalidad que hace que las personas que lo padecen tengan pensamientos o percepciones anormales y distorsionados de la realidad. La esquizofrenia, los trastornos de ideas delirantes y el trastorno psicótico breve son los más comunes.
- Trastornos de la personalidad: Son un grupo de patologías mentales que tienen en común la construcción de patrones permanentes de experiencias intensas que se desvían de lo esperado en la cultura a la que pertenece y afectan a diversas áreas del funcionamiento habitual de la persona, como pensamientos, emociones y control de impulsos. Estos patrones permanecen en el tiempo y no cambian. Algunos de los ejemplos son: el trastorno de la personalidad límite, narcisista, obsesivo compulsivo, antisocial y dependiente.
- Trastornos de ansiedad: Estos problemas son los más frecuentes en los adolescentes. A raíz de un miedo intenso o de unas expectativas desajustadas, se desarrolla una preocupación muy desproporcionada, irracional y constante. Estas expectativas pueden provenir del adolescente o provenir de otras personas, como cuando los padres insisten en que su hijo haga lo que debe hacer. Estas expectativas pueden ejercer una gran presión sobre el adolescente, especialmente si no son realistas o no tienen en cuenta sus deseos. Algunos ejemplos son: ataques de pánico, fobias o trastorno de ansiedad generalizada.
- Trastorno disocial: Es una variante de la personalidad antisocial. Los adolescentes con este trastorno son impulsivos y suelen atacar física o verbalmente a otras personas, animales u objetos. Además, es común que se cometan graves infracciones de las normas impuestas por personas que ocupan cargos de autoridad (padres, escuelas, agentes del orden…).
- Trastorno negativista desafiante: Suele estar relacionado con el trastorno disocial. Se presenta en adolescentes que suelen desobedecer, enfadarse y no asumir la responsabilidad de su comportamiento inadecuado.
- Trastornos de la conducta alimentaria: La anorexia, la bulimia y el trastorno por atracón pertenecen a esta categoría. La primera es el rechazo de alimentos y la delgadez extrema; la segunda es la ingesta compulsiva con vómitos como conducta compensatoria; y la última es la ingesta compulsiva sin conducta compensatoria, lo que la asocia con la obesidad. Son enfermedades muy comunes en los jóvenes y adolescentes, aunque también se pueden presentar en otras etapas del desarrollo.
¿Qué factores influyen en la salud mental del adolescente?
Los factores que influyen en la salud mental de los adolescentes son variados y pueden desarrollarse a lo largo de la vida de un adolescente o dentro de su entorno familiar. Es importante tenerlos en cuenta para tomar medidas preventivas y de apoyo.
- Factores familiares y sociales: El entorno y las dificultades familiares son dos de los principales factores de riesgo para la salud mental de los adolescentes. Esto no quiere decir que todos los adolescentes que viven en un entorno familiar estresado o traumático desarrollan problemas de salud mental, pero es un factor que puede predisponerlos. Especialmente se consideran las situaciones de abuso, negligencia, conflictos constantes y situaciones de estrés persistentes que pueden causar emociones intensas de tristeza, ansiedad o ira. Por lo tanto, la dinámica familiar puede causar problemas de salud mental, especialmente cuando no hay suficiente comunicación y los jóvenes no se sienten seguros. Pero esto también es aplicable a todas las relaciones sociales, no solo a las familiares. La presión social negativa también puede conducir a conductas perjudiciales y dañar el bienestar mental de los adolescentes.
- Experiencias traumáticas: Uno de los factores que más influyen en la salud mental de los adolescentes son las experiencias traumáticas, considerando como tales una amplia gama de eventos, que van desde traumas individuales como la pérdida de una persona querida hasta traumas colectivos como un desastre natural.
- Problemas de comunicación y aislamiento social: Los problemas de aislamiento social pueden causar sentimientos de soledad, depresión y ansiedad en los adolescentes. Además, estos problemas empeoran cuando los adolescentes tienen dificultades para comunicarse en su entorno familiar y social porque pueden sentir que nadie los entiende o los comprende. El ciclo de aislamiento se puede prolongar cuando no tienen un espacio seguro para compartir sus problemas emocionales.
- Redes sociales y medios de comunicación: Los medios de comunicación, incluidas las redes sociales, tienen un gran poder para influir en la percepción de la realidad de la sociedad. Por lo tanto, es crucial examinar la percepción que los medios tienen de la salud mental, especialmente en lo que respecta a los adolescentes. Hay estudios que confirman que cuatro de cada cinco jóvenes dicen que el uso de las redes sociales aumenta su ansiedad.
Si tienes sospechas de que alguien cercano puede tener problemas de salud mental, te recomendamos acudir a un especialista lo antes posible. Con el cuadro médico de Aegon, descubrirás al más cercano.
Otros factores que influyen en la salud mental de los adolescentes son:
- Vivencia de situaciones de estrés
- Deseo de una mayor autonomía personal
- Presión por pertenecer a un grupo de iguales
- Exploración de la identidad sexual
- Frustración entre la realidad y “lo que debería ser”
- Acoso escolar
- Primeras experiencias de enamoramiento y desamor
¿Cómo saber si un adolescente tiene problemas de salud mental?
Los adultos que están cerca de los adolescentes deben aprender a reconocer las señales de que algo no está bien. Identificar a tiempo los problemas de salud mental de los adolescentes ayuda a tomar medidas y poder darles el apoyo que necesitan para superar cualquier situación adversa que estén atravesando.
Algunas de las señales a tener en cuenta son:
- Muestras de irritabilidad o enfado la mayor parte del tiempo
- Expresión constante de preocupaciones o miedos.
- Problemas del sueño: insomnio o hipersomnia (o duerme muy poco o duerme demasiado). Muestra sueño constante a lo largo del día.
- Disminuye el rendimiento académico o aparecen problemas escolares.
- Pérdida del interés por actividades que antes resultaban agradables o placenteras.
- Consumo inusual de sustancias tóxicas (alcohol u otras drogas).
- Conductas autodestructivas.
💡 Puedes saber más sobre trastornos mentales aquí: 12 trastornos mentales graves
¿Cómo cuidar la salud mental de los adolescentes?
Es importante acompañar a los adolescentes en esta etapa vital, cuidando su salud mental, para que se conviertan en adultos sanos y responsables.
Para ello, podemos seguir una serie de recomendaciones:
- Facilitar espacios donde puedan relacionarse socialmente con sus iguales, para poder desarrollar sus habilidades sociales y definir su identidad.
- Fomentar una comunicación abierta dentro del ámbito familiar, para que puedan sentirse seguros al compartir sus sentimientos, sus problemas o sus preocupaciones.
- Marcar límites y normas, dejando algún margen para la exploración.
- Mantener rutinas y horarios, sobre todo en lo relativo a la alimentación, higiene personal y sueño.
- Fomentar y facilitar la realización de actividades físicas o deportivas.
- Manejar adecuadamente el uso de las tecnologías. Poner límites y horarios para el uso de internet y redes sociales.
Acompañar y estar presentes en esta etapa vital es fundamental para el buen desarrollo de la salud mental de los adolescentes. Si se detectan señales de riesgo, no se debe dudar en buscar ayuda psicológica profesional.
