Síntomas de la depresión: aprende a identificarla
En una sociedad en la que las prisas y el estrés son compañeros habituales, es lógico que trastornos como la depresión no dejen de aumentar. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud, su prevalencia ha ascendido tanto en los últimos años, que se ha convertido en la primera causa de incapacidad. Por ello, vemos tan importante abordar en este post cuáles son los síntomas de la depresión y ver cómo podemos identificarla.
No sé a ti, pero a mí este dato me da mucho qué pensar… ¿Qué nos está pasando? Por desgracia no es solo el único trastorno psicológico que va en aumento, también lo es la ansiedad.
👉 Como la ansiedad es un factor de riesgo para la depresión, te dejo nuestro artículo ¿Cómo saber si suofro ansidad? Síntomas y cómo paliarla.
Si sientes que los síntomas de una patología y otra, la depresión y la ansiedad, se entremezclan, te aseguro que no eres una excepción. Algunas personas creen que son trastornos muy distintos, pero están íntimamente relacionados.
Índice
Tengo síntomas de depresión: Un tabú
En ocasiones han llegado a mi consulta personas con síntomas de depresión inespecíficos, como el cansancio, incapaces de reconocer que había algo más detrás. A veces esa falta de reconocimiento era absolutamente inconsciente.
Hay personas que viven tan aceleradas, o que crean muros tan gruesos sobres sus sentimientos, que con incapaces de interpretar los síntomas de la depresión.
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En otras ocasiones esa falta de reconocimiento era en realidad una ocultación ¿Por qué? Por vergüenza “¿Cómo voy a estar yo deprimida? Tengo de todo: un trabajo decente, un marido bueno, un hijo sano…”
Nos gusta lucir una vida perfecta, tanto en nuestras relaciones sociales como en nuestras redes: facebook, instagram… poca gente cuenta o muestra su tristeza, y con eso se desvirtúa la naturaleza humana.
La depresión y la tristeza se entienden además como síntomas de debilidad ¿Y a quién le gusta ser débil? Por eso se ocultan, incluso nos las ocultamos a nosotros mismos.
Quizás si dejáramos un poquito de espacio a la tristeza, si la comprendiéramos y la dejásemos acompañarnos, esto no pasaría. Porque estar triste no es más que un sentimiento, y como tal tiene una función adaptativa. En este caso vinculada a la reflexión.
👉 Curiosamente cuando nos impedimos estar tristes estamos favoreciendo la depresión. Te cuento un poco más sobre esto en nuestro artículo cómo combatir la depresión.
En cualquier caso, para saber si debes combatirla, debes primero pararte a observar tus verdaderos sentimientos, y valorar si padeces o no los síntomas de la depresión más frecuentemente asociados.
¿Cómo saber si se tiene depresión?
Para saberlo vamos a guiarnos por los síntomas que sirven como diagnóstico de la depresión, y que nos describe la última actualización del manual de psiquiatría más prestigioso a nivel mundial, el DSM 5.
Podemos decir que este libro, publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría, es el manual de cabecera de todos los profesionales de la salud mental. Si bien en salud las verdades absolutas no existen, es una gran ayuda como orientación
Con esto último me refiero a que a este conocimiento debe de acompañarle siempre la escucha activa a cada paciente, y la atención personalizada. Cada mente y cuerpo son diferentes, por eso la sintomatología psicológica y su somatización puede variar.
Según este manual podemos hablar de depresión cuando los síntomas asociados se dan durante un mínimo de dos semanas y afectan a la funcionalidad habitual de la persona. Es decir, que interfieren negativamente en la actividad personal, familiar o laboral.
Y es que debes saber que una persona deprimida a menudo se siente incapaz de conversar, salir, trabajar… No es un capricho, su mente se lo impide.
La depresión no solo se manifiesta con síntomas psicológicos, sino que en muchas personas lo hace también con síntomas físicos.
Puede incluso que la persona solamente se haya percatado de la sintomatología física, sin saber que es el reflejo del malestar emocional. Por eso vamos a centrarnos en esos síntomas, porque a menudo no se relacionan con la depresión.
Síntomas físicos de la depresión
Lo primero que me gustaría aclarar aquí es que algunas personas tienen síntomas de depresión derivados de patologías puramente físicas. De ahí que en ocasiones la sintomatología depresiva se solape con alteraciones muy diversas.
- Entre esas patologías encontramos el hipotiroidismo, que suele cursar con cansancio, déficits de vitaminas del grupo B, demencias, parkinson…
- En otras ocasiones la depresión puede ser derivada de la ingesta de algunos fármacos, como las benzodiacepinas o los corticoides, o por el abuso de sustancias psicoactivas.
En cualquier caso aquí vamos a centrarnos en los síntomas físicos vinculados más directamente con la depresión, y que son:
- Alteraciones del sueño
- Alteración del apetito
- Cambios de peso
- Fatiga persistente
- Capacidad psicomotora disminuida
- Bajo umbral de dolor
Alteraciones del sueño
Son síntomas de depresión tanto el insomnio como la hipersomnia. La hipersomnia, menos común, se caracteriza por la necesidad de dormir muchas horas y dificultad para despertar o para mantenerse despierto durante el día.
Respecto al insomnio, en los pacientes deprimidos, son habituales los despertares nocturnos y la reducción del tiempo de sueño profundo, más que los problemas de conciliación.
Alteración del apetito
Tanto el incremento de las ganas de comer, en ocasiones de manera compulsiva, como la inapetencia, pueden darse en la depresión.
En el primer caso suele haber también estrés o ansiedad, mientras que la inapetencia va ligada a estados depresivos graves. Tampoco es extraña la alternancia de la inapetencia con el apetito incrementado.
👉Te dejo nuestro artículo “Alimentación y emociones”, por si quieres saber más.
Cambios de peso
Los síntomas de la depresión también pueden estar asociados a las alteraciones del apetito y del sueño. Debe investigarse por si pudiera haber otros trastornos físicos detrás, incluso psicológicos, ya que patologías como la anorexia pueden cursar con periodos depresivos.
Fatiga persistente
El cansancio, como síntoma de la depresión, puede darse ya desde primera hora de la mañana. A veces no se encuentra causa aparente, y otras está relacionado con la dificultad de tener un sueño reparador.
Nuevamente en este caso debería de profundizarse por si hubiera algún déficit vitamínico o mineral (ácido fólico, hierro, magnesio…). Deberían también valorarse las hormonas tiroideas. Por desgracia este proceder no es el más usual entre muchos profesionales.
Capacidad psicomotora disminuida
Con frecuencia estos cambios no son detectados por el paciente, sino que le son referidos por sus personas de confianza.
Pueden manifestarse tanto en forma de agitación (hiperactivación) como al contrario, por retardo psicomotor. En este caso además de movimientos lentos a menudo se detecta descoordinación, que la persona tarda en contestar o que habla de manera muy pausada.
Bajo umbral de dolor
Parece que la reducción en la producción de neurotransmisores, que se da en la depresión, nos sensibiliza al dolor. Esto quiere decir que nos hace más susceptibles a que, ante cualquier daño, se genere una respuesta dolorosa ¿Aún no lo sabías? Pues el dolor es generado en el cerebro.
No debemos olvidar tampoco que el dolor crónico es un factor de riesgo para la depresión. Como ves la relación entre estas dos respuestas del cerebro, es muy estrecha, más de lo que muchos sospechan.
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Síntomas psicológicos de la depresión
Los síntomas de la depresión en el plano psicológico son sin duda los más conocidos y característicos. De hecho, para que haya un diagnóstico de depresión, se debe de padecer al menos uno de estos dos:
- Estado de ánimo depresivo
- Pérdida marcada del interés o placer con casi todas las actividades.
Cualquiera de las dos debe de darse durante la mayor parte del día, sino no se cumpliría el criterio que da lugar al diagnóstico de depresión.
Si bien existen diferentes tipos de depresión, encontramos muchos síntomas de la depresión comunes, como son:
- Baja autoestima
- Dificultad de concentración
- Sentimiento de inutilidad
- Marcada indecisión
- Sentimientos de culpa excesivos
- Frecuentes pensamientos sobre muerte o suicidio.
Según qué tipo de trastorno depresivo se padezca pueden aparecer también otros síntomas: irritabilidad, desesperanza, tristeza repentina, angustia por el futuro, falta de reactividad frente a los estímulos…
Si bien creo que todos sabemos a lo que nos referimos con la mayoría de estos síntomas, hay uno que destaca por su ambigüedad e importancia. Es el “estado de ánimo depresivo” ¿Qué es exactamente eso?
Pues podemos definirlo como: “Un estado de tristeza profunda, persistente y patológica, o una sensación de vacío, que se acompañan de sufrimiento emocional”
Como para casi todo hay diferentes definiciones, y también matices e intensidades, pero creo que esta es una explicación muy acertada.
Causas de la depresión
En la identificación de las causas debemos tener en cuenta que no existe un sólo factor que nos explique la aparición de una enfermedad. Nombramos a continuación los principales factores:
- Factores genéticos: Numerosos estudios han puesto en evidencia que tener antecedentes familiares de depresión incrementa en un 25 o 30% la probabilidad de padecerla.
- Factores fisiológicos: Se ha venido relacionando la aparición y cronificación de la depresión con una disminución de los niveles de algunos neurotransmisores como la serotonina y la noradrenalina en las conexiones neuronales. Por ello, en muchos tratamientos se cuenta con un importante aliado como es la medicación.
- Factores personales: También se ha hallado una mayor incidencia de esta enfermedad en mujeres que en hombres, y en personas de los 35 a los 45 años.
- Factores ambientales: Estos pueden ser eventos negativos que sufre la persona en su entorno (paro, separación, duelo…), el aislamiento social o el consumo de sustancias adictivas.
¿Qué hacer para combatir la depresión?
Ahora que tienes un montón de información para valorar lo que te sucede ¿Crees que tienes síntomas de depresión? Si es así, o si aún tienes dudas, no pospongas acudir a un psicólogo o psiquiatra, ellos podrán ayudarte y cuanto antes comiences mejores serán los resultados.
Recomendamos un tratamiento integral de la persona y su entorno, así como una combinación entre terapia psicológica y farmacológica en los casos graves y moderados. Por ello es de suma importancia valorar la gravedad del cuadro ya que en casos de depresión leve se ha visto más efectiva la terapia psicológica sin necesidad de recurrir a los fármacos.
En lo que al tratamiento psicológico se refiere, han demostrado una gran eficacia a través de numerosos estudios, la terapia cognitivo conductual y la terapia interpersonal.
Otros tratamientos que han demostrado cierta eficacia a través de diversos estudios son la meditación, técnicas de relajación, ejercicio físico o autoayuda.
👉Os dejamos aquí estas 7 técnicas de relajación muy sencillas.
Detección precoz
Reiteramos que un buen diagnóstico de este trastorno de forma precoz puede ser de suma importancia para la persona que lo padece, ya que permitirá realizar un tratamiento temprano y evitar así que se cronifique. En los casos más graves este trastorno puede llevar a la incapacidad laboral permanente.
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