Alexitimia: Qué es, síntomas, causas y tratamiento
En un mundo en el que las emociones cada vez se exteriorizan y comparten más, entrando en juego, por ejemplo con las redes sociales, no mostrarlas, lo que ocurre con la alexitimia, no solo es extraño, sino también chocante.
Además puede generar otros problemas añadidos, derivados de la incomprensión de las personas que les rodean: familia, amigos y compañeros de estudios y trabajo.
Todo esto hace tan relevante conocer qué es la alexitimia, su diagnóstico y condicionantes, así como las mejores formas para superarla.
Índice
¿Qué es alexitimia?
La alexitimia es un término que se utiliza para describir la dificultad o la incapacidad para identificar, describir y expresar emociones en uno mismo. Además, quien la sufre suele desarrollar diferentes síntomas fisiológicos que la acompañan: sudoración, tensión muscular, hormigueo en el estómago o aceleración del ritmo cardiaco, entre otras.
Esto no significa que carezcan de emociones, sino que existe tanto dificultad para expresarlas como para diferenciarlas. Así, por ejemplo, no van a relacionar un mayor ritmo cardiaco con el nerviosismo previo a una noticia importante.
Cualquier persona puede sufrir alexitimia, pero los datos reflejan que es más frecuente en hombres que en mujeres y como veremos más adelante suele venir acompañado de otros tipos de problemas y trastornos.
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Síntomas de alexitimia
La alexitimia es principalmente un problema propio, derivado de esta incorrecta gestión de las emociones para expresarlas o diferenciarlas, pero también conlleva incomprensión ante las emociones ajenas. Esto se refleja en diferentes síntomas:
- Inexpresividad, incluso en momentos muy emocionales.
- Monotonía en su forma de comunicación.
- No sabe diferenciar emociones, incluso las que son evidentes como el miedo o la ira, tanto las propias como las ajenas.
- Toma de decisiones desde un punto de vista frío y racional sin tener en cuenta las emociones.
- No tiene ensoñaciones, no usan la imaginación y suele carecer de planes que se salgan de lo racional.
- Tienda a ordenar sus prioridades exclusivamente de forma racional.
- Tiene problemas de sociabilidad, ya que les cuesta comprender las emociones de los demás.
Cómo son las personas con alexitimia
Todos estos síntomas reflejan que quien sufre alexitimia tienen problemas de afectividad, tanto para expresar sus emociones como para expresar las suyas, lo que lleva a que se les denomine a veces con términos como “analfabetos emocionales” o “afásicos afectivos”.
Pero también genera personas:
- Muy concretas, con un estilo cognitivo pragmático y directo.
- Detallistas a la hora de analizar situaciones, y a veces reiterativo.
- Tendencia a recurrir la acción rápida para afrontar conflictos.
- Centradas en lo inmediato.
- Desprovisto de fantasías.
- Sin capacidad de abstracción.
- Pobreza en la gesticulación y la palabra, utilizando un lenguaje lento y aprosódico (sin cambios en la entonación).
- Relaciones interpersonales estereotipadas, enmarcadas en la subordinación o en la dependencia.
- Alto grado de conformidad social.
- Reducción de la calidad del sueño al tener menos fases REM.
Diferentes causas de alexitimia
Aunque las investigaciones científicas sobre la alexitimia avancen, sigue teniendo aspectos desconocidos. De hecho, se barajan distintas circunstancias, muy diferentes desde psicológicas a fisiológicas e incluso genéticas, que conlleva que existan diferentes causas:
Daño cerebral
La corteza insular o ínsula, es una estructura del cerebro humano ubicada en su zona literal donde reside el lóbulo de la ínsula, que tiene un importante papel en la toma de decisiones, el procesamiento emocional y la atención. Si esta zona está dañada genera problemas en las habilidades sociales, la empatía y las emociones, algunos estudios relacionan las lesiones a la ínsula con la empatía y la ansiedad.
Traumas en la infancia
Es muy común que personas que han experimentado circunstancias traumáticas y estrés postraumático, especialmente en la etapa inicial de la infancia sufran alexitimia. El trauma en sí, pero también el rechazo que genera, puede originar cambios cerebrales que dificulten identificar y sentir emociones a lo largo de la vida.
Autismo
Dentro de los múltiples síntomas del trastorno del espectro autista, uno de ellos que tradicionalmente se ha señalado es la falta de empatía. Pero los últimos estudios científicos señalan que el autismo no es el causante, sino que aproximadamente la mitad de las personas con autismo tienen alexitimia. Por todo ello, el autismo debe considerarse como causa de la alexitimia, pero no el causante de las faltas de emociones.
Depresión
La depresión severa, la derivada del postparto e incluso la esquizofrenia es coincidente entre 3 y 5 de cada 10 pacientes que sufre alexitimia. Esta se relaciona por su naturaleza eminentemente afectiva aunque sus manifestaciones pueden superponerse y confundirse.
Enfermedades y lesiones neurológicas
Otras enfermedades y lesiones neurológicas están relacionadas con la alexitimia, entre las que están la enfermedad de Alzheimer, la enfermedad de Huntington, Parkinson o la esclerosis múltiple.
Ejemplos de alexitimia
La alexitimia puede presentarse de forma muy variada como hemos visto, aunque existen algunos ejemplos recurrentes, que en muchas ocasiones no relacionamos con este trastorno:
- Decisiones sin análisis de pros y contra. Son personas que especialmente van al grano, muy directas sin pensar en consecuencias a medio y largo plazo, tanto propias como ajenas.
- Personas que toman decisiones exclusivamente teniendo en cuenta sus preferencias o apetencias en ese momento o la funcionalidad y utilidad que van a conseguir, sin más consideraciones.
- Personas que no tiene ningún tipo de ambiciones o aspiraciones. Esto es debido a que al no tener capacidad de ensoñación y abstracción, centran su vida en principios exclusivamente realistas y con ello se alejan o consideran que es perder el tiempo centrarse en propuestas más arriesgadas.
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¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la alexitimia es complejo porque el paciente no es consciente de tener ningún tipo de problema, por lo que viene en primer momento de la observación externa, especialmente si se realiza y compara en distintas situaciones. Esta labor es importante, porque lo normal es que este tipo de personas, según su comportamiento se consideran o apáticas, por su forma de actuar ante la vida, o en ocasiones antipáticas por su relación con su entorno.
Por tanto, desde fuera se debe tener en cuenta sentimientos exagerados o inadecuados ante situaciones en las que debería reaccionar de otra forma como:
- Confusión.
- Incomodidad.
- Ira.
- Falta de afecto.
Pero también el paciente puede aportar información, especialmente si tiene dificultad a la hora de relacionar síntomas que son normales ante circunstancias anímicas y alarmarse, como tener palpitaciones propias de un pequeño problema de ansiedad o temor ante alguna novedad.
Por último también se tiene en cuenta la existencia de otras dolencias o causas relacionadas como se han mencionado anteriormente, entre las que destaca la depresión, el autismo u otros trastornos neurológicos.
Tratamiento para la alexitimia
Estas causas tan variadas llevan a que también los tratamientos sean muy distintos por lo que la base debe ser la mejor evaluación del paciente, tanto de sus circunstancias actuales como las pasadas. Así por ejemplo es fundamental ver si ha tenido algún problema en la infancia, en su desarrollo, tanto físico como psicológico. Con todo ello podemos distinguir dos tipos de casos:
Si se determina que la alexitimia se debe a casusas fisiológicas, tendrá algo de más peso distintos tratamientos que aborden sus causas, pero siempre acompañado de ayuda psicológica que buscará:
- Análisis emocional en el que el paciente sienta qué son las emociones.
- Trabajar la expresión emocional, tanto la propia como en conocer y reaccionar de forma debida.
- Conocer y diferenciar los síntomas fisiológicos, los gestos, los movimientos o el tono de voz que rodean las emociones.
En definitiva, nos encontramos ante una dolencia compleja en la que aún queda mucho por saber, pero que debe ser conocida y tratada de forma integral, tanto por quien la sufre como por las personas que le rodea, aportando la comprensión imprescindible. Estos cuidados siempre deben tener el tratamiento médico más adecuado y personalizado que aborde desde aspectos fisiológicos como psicológicos.
Si quieres averiguar más cosas sobre la alexitimia y su relación con la salud mental, te dejo la publucicación de la Confederación de la Salud Mental de España sobre la salud mental es cosa de todos.
Por todo ello la base está en conocer mejor la existencia de esta dolencia, por lo que es importante tener toda la información necesaria como la que hemos introducido en este post, que si te ha parecido importante, no debes dejar de compartir.