¿Por qué consumir frutas de temporada? Conoce sus múltiples beneficios
Enlace copiadoQuizás ya hayas escuchado en numerosas ocasiones que consumir frutas de temporada tiene multitud de ventajas, pero posiblemente aún no las conozcas todas, o no comprendas bien los beneficios que eso puede suponer para ti. Y seamos sinceros, si algo no se conoce en profundidad, tampoco le solemos hacer mucho caso ¿Verdad? ¡Por eso hemos escrito este post!
Las frutas de temporada son un auténtico tesoro nutricional, lleno de vitaminas y minerales para cuidar nuestro cuerpo. En este artículo te hablaremos de las frutas que podrás disfrutar durante los próximos meses y sus beneficios. Por lo de pronto, estoy segura de que también te puede interesar nuestro artículo 👉 “Verduras y frutas de primavera”
Me encantaría además aprovechar este tema, para animarte a incrementar tu ingesta de frutas y verduras de temporada. Los vegetales deben de ser la base de una dieta saludable, pues son el grupo de alimentos más nutritivo.
Porque solo un elevado consumo de frutas y verduras, puede garantizar la cantidad necesaria de vitaminas y minerales para que tu cuerpo funcione de manera óptima, y prevenir así enfermedades. Un consumo elevado de vegetales se ha mostrado útil en la prevención de multitud de patologías: infecciosas, digestivas, como el estreñimiento, o metabólicas: colesterol, triglicéridos…
Índice
- 1 ¿Cuáles son las frutas de temporada?
- 2 Calendario de frutas de temporada
- 3 Frutas y verduras de temporada, mes a mes
- 4 Beneficios de las frutas de temporada
- 5 ¿Qué ventajas tiene consumir frutas y verduras de temporada?
- 6 Efectos nocivos para el medioambiente de no consumir frutas de temporada
- 7 ¿Por qué es más cara la fruta de fuera de temporada?
- 8 ¿Cómo debemos comer la fruta?
¿Cuáles son las frutas de temporada?
Las frutas de temporada suelen catalogarse por las diferentes estaciones. Para ello se tiene en cuenta los meses en los que, tras seguir la planta su desarrollo natural, se recolectan sus frutos. Por lo tanto, según el momento de la recolección, diferenciamos las siguientes frutas y sus temporadas:
- Frutas de temporada de invierno
- Frutas de temporada de primavera
- Frutas de temporada de verano
- Frutas de temporada de otoño
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La época en la que se da una mayor abundancia de frutas es en verano, y es en esta estación donde encontramos las frutas más jugosas y dulces. Para conocer a fondo la época en la que es preferible consumir cada fruta, se suele recurrir a los calendarios de fruta de temporada.
Calendario de frutas de temporada
Estos calendarios suelen mostrar con un sencillo esquema en qué mes es más conveniente consumir cada fruta, y suelen resultar muy útiles. Si los tienes siempre a mano, podrás consultar con ellos la temporada de las distintas frutas, y abaratar así tu cesta de la compra, además de tener un extra de nutrientes.
Tal como te mostramos en este ejemplo, disponible en la web del Ministerio de Agricultura, consisten en una tabla en la que se indica en la primera fila los nombres de los meses, y en la primera columna las distintas frutas. Después, aparecen señaladas mediante algún tipo de símbolo, las frutas correspondientes a cada mes.
Puedes encontrar distintos calendarios de frutas de temporada en internet, así que te animo a utilizarlos, pues seguramente sean las forma más sencilla de conocer las frutas de temporada.
Frutas y verduras de temporada, mes a mes
Siguiendo el calendario de las frutas y verduras de temporada en nuestro país, nos damos cuenta de que la estación más rica en este delicioso postre que nos ofrece la naturaleza, es el verano.
En los siguientes artículos os vamos a contar las frutas de temporada según cada mes, para que sepas en qué mes exacto puedes disfrutar de ellas en todo su esplendor. Toma nota de todas.
Enero
Con el frío del invierno es muy importante elegir las frutas y verduras de temporada más adecuadas que aporten las calorías, nutrientes y vitaminas necesarias para preparar nuestro menú semanal.
Una de las frutas más populares y esperadas durante el mes de enero son los fresones, que llegan antes que las fresas y son ricos en vitamina C. Los aguacates también forman parte de las frutas y verduras de enero, un macroalimento rico en potasio que ayuda a regular la glucosa en la sangre.
Febrero
Durante el mes de febrero seguimos teniendo frutas y verduras de la temporada de invierno. Junto con las fresas empezamos a ver naranjas, limones y pomelos. También nos encontramos con grandes aportaciones nutricionales entre las verduras de temporada de febrero como el brócoli, con gran aporte inmunitario, o las espinacas y su aporte de magnesio.
Marzo
Con la entrada de la primavera en marzo también llega la subida de temperaturas y el cambio en nuestro menú. En marzo encontraremos frutas y verduras como la frambuesa, el kiwi, el puerro o la calabaza.
Abril
En abril y con la primavera ya encima, podemos empezar a disfrutar de algunas frutas de hueso como son las ciruelas, con su destacado dulzor, o las peras y las manzanas, que ayudan a la regulación intestinal. Este mes empiezan a ser de temporada también los calabacines, los pimientos o las judías verdes. Conoce todas las frutas y verduras de temporada en abril.
Mayo
El calor de mayo anuncia las frutas y verduras de verano, por eso este mes es ideal consumir frutas como las cerezas, los albaricoques o las nectarinas, y dar comienzo a las ensaladas de verano con el pepino. Descubre qué nos aportan estas frutas y verduras de mayo.
Junio
En este mes en el que el calor ya toca a la puerta, son muchos los árboles frutales con su fruta ya a punto, por eso, las reinas de junio son las frutas de hueso: la cereza, el albaricoque, el melocotón y la nectarina. Todas estarán en su punto y deliciosas. Estas frutas se caracterizan por su elevado contenido en antioxidantes y betacarotenos, un precursor de la vitamina A, capaz de proteger a nuestra piel y mucosas, como la digestiva o la respiratoria.
Julio
Como la naturaleza es muy sabia, en este mes en el que el calor se intensifica, podemos refrescarnos con las frutas de temporada de verano con más alto contenido de agua, como la sandía o el melón, pues es el mejor mes para ellas.
Contienen además muchísimos betacarotenos y licopenos, otro potente antioxidante, con lo cual nuestra piel seguirá estando protegida, si los consumes con asiduidad. Te dejo nuestro artículo sobre cuidados de la piel, por si quisieras aprender más sobre esto.
Junio es además el mes por excelencia para degustar las ciruelas y las brevas en su punto óptimo. Ambas muy ricas en fibra y muy útiles para personas que padezcan estreñimiento. Descubre qué nos aportan las frutas y verduras de julio.
Agosto
En este mes podemos seguir disfrutando de la gran mayoría de las frutas de temporada de verano, pero es el mejor mes para otras frutas que pueden consumirse todo el año. Hablamos de muchas variedades de manzana, de pera, y además del membrillo y el mango, cada vez más cultivado en nuestro país.
Tanto la manzana como la pera tienen un elevado contenido en fibra prebiótica, la que alimenta a las bacterias buenas de nuestro intestino, contribuyendo así a mejorar nuestras digestiones y nuestro sistema inmune.
El membrillo es una fruta astringente, y por ello resulta eficaz para controlar las diarreas; y respecto al mango, además de poseer también una elevada cantidad de fibras prebióticas, destaca por su elevadísima cantidad de antioxidantes.
Septiembre
En este mes toca despedirnos de muchas de las frutas del verano, pero damos la bienvenida a otras más típicas del otoño, que también están riquísimas, o al menos a mí me lo parecen. Especialmente si han sido recolectadas en el momento oportuno.
Cuando hablamos de frutas de temporada en septiembre, hablamos de algunas variedades de higos, de las uvas, los arándanos y las moras. Todas comparten ser muy ricas en fibra, por lo tanto son un buen aliado contra el estreñimiento, y además, poseer muchísimos antioxidantes, algunos de los cuales, como los antocianos del arándano, capaces incluso de proteger a nuestra retina ocular según diversos estudios.
Octubre
Como todos sabemos, octubre nos trae cada año una escena otoñal y el comienzo de las temperaturas bajas. Por ello, debemos empezar a prepararnos para el frío, y qué mejor manera que hacerlo con unas buenas castañas asadas. Las castañas y el membrillo son frutas muy típicas de octubre, junto con las espinacas, las setas o los boniatos.
Noviembre
Durante el mes de noviembre, las frutas de temporada que vemos aparecer son la chirimoya y el caqui, dos frutas con sabores muy particulares. Sin embargo, con la llegada de Halloween todos sabemos que las verdaderas protagonista durante el mes de noviembre son las calabazas.
Diciembre
La finalización del año en diciembre nos deja una preciosas estampas navideñas, frío, lluvia y el disfrute de estos momentos. Las frutas de las que también podemos disfrutar durante el mes de diciembre son el kiwi, la piña o el plátano, un toque tropical para acabar el año. Eso sí, puedes complementarlas con verduras de diciembre como las acelgas o el brócoli.
Beneficios de las frutas de temporada
Como hemos explicado, las frutas de temporada son las cultivadas y recolectadas en los meses más adecuados, siguiendo el ciclo natural de la planta. Por tanto, están recibiendo la cantidad óptima de luz, agua, calor etc…. Todo esto mejora su desarrollo, y además hace que contengan una mayor proporción de micronutrientes y antioxidantes, lo que se nota en casi todo. Por ello, se hacen imprescindibles para muchas funciones. Entre ellas destacan:
- Proteger a los tejidos de agentes pro-oxidantes
- Mantener en buen estado a la microbiota intestinal
- Participar en todas reacciones bioquímicas de tu cuerpo:
- Para obtener energía
- Regenerar los tejidos
- Fortalecer el sistema inmune
- Ayudar al sistema nervioso
Por otro lado… ¿Qué pasa con su sabor? ¿Y su olor? La experiencia nos demuestra que no hay comparación, la fruta de temporada es mucho más sabrosa ¿Te has parado a saborear un buen tomate en verano? ¿Lo has comparado con los tomates de invierno? Está claro que están mucho más sabrosos en verano.
Como anécdota te cuento además que el tomate es una fruta. Hay mucha gente que piensa que es una hortaliza por su aspecto, pero no, es una fruta de temporada de verano, así que en muy poquito tiempo podremos disfrutarla en todo su sabor.
¿Qué ventajas tiene consumir frutas y verduras de temporada?
Consumir frutas y verduras de temporada nos aporta beneficios como un mayor aporte de vitaminas, pero también mejor sabor, olor y color dado que están en su mejor momento. Consumir una fruta o verdura en su temporada también nos asegura consumir un producto fresco.
La carga nutricional de las frutas de temporada
Se ha comprobado que cuando las frutas se cultivan respetando los tiempos de su ciclo natural, sin prisas y en la estación correspondiente, su carga nutricional es más elevada. En la cantidad de nutrientes de los vegetales influyen por supuesto otros factores, como el uso de fertilizantes, mayor si la fruta no es de temporada, o la riqueza mineral del suelo.
Las frutas de temporada son el alimento esencial para conseguir de forma natural no solo todo tipo de vitaminas, también minerales y otros componentes esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Por ejemplo, las fresas son ricas en hierro y vitaminas A, C y K. Los albaricoques son ricos en betacarotenos y vitamina A, aunque el melón es la fruta que contiene más vitamina. Las ciruelas destacan por su aporte en fibra a la que hay que unir potasio y vitamina C y K; y las cerezas, cuyo consumo no deja de crecer cada año en España, lo son en vitaminas A, C y K.
Si tenemos en cuenta que la ingesta de algunas vitaminas, como la vitamina C, es unas 6 veces menor en la actualidad, respecto a las poblaciones cazadoras y recolectoras, nos daremos cuenta de la importancia de consumir frutas con la mayor cantidad de nutrientes posibles.
Al fin y al cabo hemos sido recolectores y cazadores durante miles de años, y nuestra fisiología se desarrolló en este entorno evolutivo. Seguro que a ti, y a mí, esa época nos parece muy, muy lejana, pero para nuestra genética no lo es tanto.
¿Cómo nos afecta el uso de fertilizantes químicos en la fruta?
Si queréis información sobre el impacto de los tiempos de cultivo en la composición nutricional de las frutas, o según el tipo de fertilizantes utilizados, os dejo este artículo de la Doctora en ingeniería agroquímica, Mª Dolores Raigón. Es una de las mayores expertas en nuestro país, y a la que hace años tuve el placer de escuchar. Os adelanto que los fertilizantes químicos, enriquecen la fruta en el mineral específico que contienen, y además aumentan su tamaño, sin embargo reducen su contenido en los otros micronutrientes y en antioxidantes , incluso hasta la mitad.
Un consumo inadecuado de micronutrientes y antioxidantes, se ha relacionado con una mayor predisposición a padecer diversas patologías crónicas e infecciones.
Como os decía en las frutas de temporada el uso de fertilizantes químicos es menor, por lo que este problema se reduce. Conclusión, estas frutas, y aún mejor si son cultivadas de manera tradicional, serán más pequeñas y probablemente menos bonitas, pero también más sabrosas y nutritivas.
La mejor forma de adaptarnos a los cambios de temperatura y al sol
Las frutas de temporada son un alimento perfecto para adaptarnos al cambio de temperatura que conlleva la primavera cuando avanza y el verano. Un cambio que también se produce en nuestro biorritmo, con días más largos y noches más cortas. Su alto composición en agua y su capacidad de saciar, pero con una digestión ligera, las hace perfectas para las largas jornadas estivales. A la vez que ayudan a la hidratación de forma natural.
También las frutas de temporada ayudan a preparar nuestra piel para jornadas de sol más intensas. Frutas como melocotones o albaricoques son ricas en betacorotenos, fuente fundamental de vitamina A. Esta vitamina nos ayuda a proteger la piel de los radicales libres y reduce el riesgo de sufrir quemaduras solares; e incluso protegen la piel del envejecimiento.
Efectos nocivos para el medioambiente de no consumir frutas de temporada
Cuando consumimos fruta de temporada estamos siguiendo el ritmo que nos marca la naturaleza, y esto, que suena hasta poético, tiene muchas repercusiones prácticas. El cultivo de la fruta de temporada tiene un bajo impacto ambiental debido a que implica un menor uso de agroquímicos: fertilizantes, pesticidas, ect… que a menudo resultan muy contaminantes. Muchos agroquímicos contaminan al agua del subsuelo, de charcas y lagunas, dañando la fauna y flora acuática. Otros compuestos, se evaporan parcialmente, contaminando el aire.
No solo eso, las frutas y verduras de temporada también suelen precisar una menor cantidad de agua de regadío. Como muchas de las regiones de nuestro país, padecen escasez de agua, no está nada mal tener esto en cuenta, a la hora de hacer nuestra compra.
Por otro lado, al ser frutas de temporada cultivadas en tu país o región, las emisiones de dióxido de carbono derivadas de transporte hasta el consumidor, son mucho menores. Te recuerdo que esas emisiones son las causantes del efecto invernadero, y del calentamiento global que padecemos.
En lo que se traduce es que el ciclo reproductivo de la planta, que culmina con la maduración de la fruta, está en consonancia con las variables climatológicas que se van sucediendo; y por tanto el aporte artificial de luz, fertilizantes y agua, es menor.
Impacto medioambiental de la fruta de fuera de temporada
Todo ello, esto supone importantes impactos medioambientales:
- Por un lado el gasto de luz implica irremediablemente producción de dióxido de carbono (CO2); y todos conocemos ya el gran efecto que este gas tiene en el calentamiento global.
- Por otra parte, a nadie se le escapa el problema de escasez de agua que hay en nuestro país; y que hace que cada verano, haya que imponer restricciones en el consumo de agua potable en algunas zonas. Se trata de un problema que, debido al cambio climático, no deja de agravarse, así que deberíamos valorar y cuidar cada gota.
- Por otro lado al reducir el uso de fertilizantes se protegen las aguas, el aire y hasta al propio suelo. Los fertilizantes son la principal causa de de contaminación de las aguas; tal como nos indica este informe de la FAO, siglas de Food (Alimentación) and Agriculture Organization, sobre el efecto de la producción de alimentos en el medioambiente.
El efecto de los fertilizantes en el medio
Cuando el nivel de fertilizantes aumenta en el agua, comienzan a predominar un tipo de algas que dejan al ecosistema sin oxígeno, y entonces, paulatinamente, el resto de seres vivos van muriendo.
Por desgracia tenemos un ejemplo muy reciente al respecto, el colapso del Mar Menor, hace tan solo unos meses, donde vimos las imágenes de miles de peces muertos, y la ruina de las familias que vivían de la pesca.
En el suelo, el uso frecuente o excesivo de fertilizantes, provoca su acidificación, y destruye los microorganismos que conviven en simbiosis con las plantas, lo que favorece que padezcan enfermedades, y que se nutran con dificultad.
Finalmente se sabe que buena parte de los fertilizantes se volatilizan, hasta cerca de la mitad en el caso de los derivados nitrogenados, ocasionando fenómenos tan dañinos como la lluvia ácida, que afecta ya a muchísimos bosques.
El transporte de la fruta que no es de temporada
Más allá de los fertilizantes, a nuestro planeta también le perjudica que consumamos fruta de fuera de temporada porque a menudo llegan desde el otro hemisferio, y entonces incrementamos el otro gran contaminante mundial, el transporte.
Traer tomates en invierno desde las antípodas de nuestro planeta, o casi, tiene costes ecológicos muy altos, sobre todo por la elevada producción de CO2 que lleva aparejado, contribuyendo muy notoriamente al cambio climático.
¿Por qué es más cara la fruta de fuera de temporada?
Con todo esto te habrás dado cuenta, de que con el consumo de fruta de temporada estás haciendo un gran favor al planeta, pero hay otro aspecto también muy interesante. Las frutas y verduras de temporada, hacen un gran favor a nuestro bolsillo ¿Has notado que son más económicas?
Con algunas como las fresas o los arándanos, la diferencia es especialmente significativa, pero sucede con todas. Esto es debido, precisamente a esa menor cantidad de agroquímicos que se emplean en su cultivo, lo que abarata los gastos de cultivo. Influye también los menores gastos de transporte, y todo esto repercute finalmente en su precio de venta.
Cuando se produce la fruta fuera de su temporada natural los gastos asociados se incrementan considerablemente. Te resumimos los factores implicados, algunos ya los conoces. En general supone:
- Mayor número de fertilizantes
- Consumo agua mayor
- Más días de transporte
- Aumento en el tiempo de refrigeración
- Más sustancias para prolongar su vida útil
- Control de temperatura (Invernaderos y otros)
Todo esto es para mejorar el rendimiento y alargar el tiempo que la fruta está disponible en el mercado, pero supone un incremento de recursos que, obviamente, repercute en nuestro bolsillo. Por eso conocer las frutas propias de cada estación también te ayudará a ahorrar.
Por mi parte, no puedo evitar recordar en estos momentos los veranos en mi pueblo de León, y mi madre pidiéndole desde la ventana de nuestra casa unos tomates a mi abuelo. Este enseguida se acercaba a la huerta que teníamos justo en frente de la ventana de la cocina, los cortaba, y por esa misma ventana se los daba.
Esos tomates recién recolectados, tenían un sabor inigualable, pues habían sido cultivados en la estación que les corresponde, y sobre todo, sin prisas. Por eso no puedo dejar de recomendarte que consumas cada vegetal en su momento.
¿Cómo debemos comer la fruta?
No hay que olvidar que la mejor forma de comer la fruta es cruda, entera y a ser posible con su piel. Por ejemplo, si bebes un zumo, aunque lo hagas y consumas en el momento, pierdes buena parte del aporte de fibra. También, es importante variar las frutas que consumimos, ya que cada fruta tiene nutrientes distintos y combinándolas obtendremos más y mejores ventajas.
Aún así, especialmente para los más pequeños, muchas veces podemos optar por formas de presentación distintas que les parezcan más atractivas, desde batidos o hasta helados, tan apetecibles cuando llega el calor. Con todo ello conseguiremos que además de comprar un producto al mejor precio y con todas las propiedades de sabor intactas conseguir otros beneficios para tu salud.
Como ves consumir frutas de temporada es tan bueno para ti como para nuestro planeta, así que aprovecha que vivimos en el país que es la “huerta de Europa”, y disfruta de ese postre de la naturaleza cargado de propiedades y nutrientes.
¿Te ha gustado nuestro post? Espero que sí, ahora te toca a ti compartirlo para tratar de extender la conciencia del consumo responsable ¡Muchas gracias!
